Otro finde marcado por la variabilidad meteorológica y que afortunadamente al final nos ha dado tregua aunque ha hecho que tuviéramos que improvisar sobre la marcha.
El viernes contacté con Jordi C. y Assumpció para ver que planes tenían para el sábado y comentando la posibilidad de ir a Sant Llorenç de Montgai, me pareció un buena idea. Quedamos en Collbató para subir en un sólo coche y el tiempo, tal como habían pronosticado, estaba despejado, con temperatura no demasiado baja. En el aparcamiento para acceder a La Formiguera había bastantes coches, lo cual ya nos hizo temer que estaría bastante concurrido, así que fuimos con varias reseñas para poder elegir entre las que no estuvieran ocupadas. Enseguida vimos una cordada en la 'Fase uno', que resultaron ser Pere Joan y Montse y otra acabando una vía del 'Cilindret'. Cuando ya casi estábamos preparados para comenzar la aproximación nos encontramos con Pau, monitor de la S.I.J. de la AEC y con el que coincidimos en 'Ailefroide' y en las 'Roques del Nas'
Escalador en la cima del Cilindret
En el segundo largo de Fase uno
Al llegar a la vía del tren vimos alguna cordada en la '
Martinetti' y en la '
Normal':
Al llegar a la base vemos que había una cordada iniciando '
Lo Pep', otra en el segundo largo de la Normal y otra en la primer reunión de '
Memoria Selectiva', que resultaron ser Remei y 'Pinto', que nos vino el recuerdo de la vía que le dedicó Juan Gutiérrez en Abella de la Conca.
Al haber tenido un 'problemilla' logístico, optamos por la vía '
Savina Wall':
Nos repartimos los largos de manera que Jordi escalaría los dos primeros y para mi el tercero. Al hablar con Remei nos confirmó que habían entrado por la Memoria Selectiva, pero que su intención era seguir por Savina Wall, así que nos adaptamos y dejamos una discreta distancia de seguridad. Sin problemas fuimos escalando los tres largos y cuando empecé a escalar el tercer largo ellos ya rapelaban por '
La Colá'. El sol que estaba reluciente al iniciar la vía, fue desapareciendo tras unas densas nubes, que por suerte no vinieron acompañadas de viento, pero que hizo bajar algo la temperatura.
En el primer largo de Savina Wal
En el segundo largo de Savina Wall
En el tercer largo de Savina Wall
Una vez estamos los tres en la R-3, sin perder tiempo emprendemos el descenso que con un largo rápel de 60m nos lleva de nuevo a pie de vía, cruzándonos nuevamente con los compis de Lleida que estaban escalando los dos largos finales de Memoria selectiva.
Rapelando
Al llegar a la base de la pared propuse a los compis de escalar una variante que se ha abierto entre la Normal y la Memoria selectiva, que recorre un bonito espolón y con visibles parabolts y que el último día que escalamos La Colá ya pudimos verlos. El amigo Pepe ya me había informado que la dificultad no llegaba a V. Posteriormente vimos una reseña por la red que la reseñaba:
Desplegando cuerdas a pie de vía y con el sol que nos vuelve a acompañar
Como yo propuse la vía, me tocaba escalar primero, pero viendo el buen equipamiento que tiene para poder escalarla como si fuera una vía deportiva con reunión con argollas para descolgarse, optamos que después me descolgaran para que así Jordi también la pudiera escalar de primero. Este largo es de unos 20 metros y cuenta con un parabolt en la base que se puede utilizar de R-0 y después 8 parabolts más. La roca desde abajo siembra algo de dudas, pero ha sido saneada convenientemente y con una dificultad de IV de promedio y un paso puntual de IV+ en un pequeño resalte. A los tres nos gustó y la vimos como una buena opción para llevar a gente que empieza y que, incluso, si quieren escalar de primero también es una buena opción.
Escalando en la Variante de entrada a la Vía Normal
Ya tuvimos suficiente y nos dimos por contentos con lo escalado y emprendimos el regreso al aparcamiento, donde aún pudimos deleitarnos con loa colores del otoño.
Para el domingo ya habíamos quedado con Jordi F. y con Ismael M., inicialmente para ir a Vilanova de Meià, pero ya el viernes viendo el nefasto pronóstico de la meteo del domingo, hablamos de hacer algo de deportiva por las cercanías de Barcelona, pero volviendo el sábado de Sant Llorenç de Montgai ya vimos que el pronóstico había variado sustancialmente retrasándose el frente anunciado, con lo que por la noche hablando con los compis mantuvimos la idea inicial de ir a Vva de Meià y en concreto, a propuesta de Jordi, escalar la '
Txubaskos Baskos', que re-equipamos hace siete años, pero que no la habíamos vuelto a escalar, y en mi caso por séptima vez.
Reseña original
Al llegar a Vva de Meià 3º en la puerta del Cirera así que almorzamos tranquilos, en esta ocasión con poco personal en el bar. Después del almuerzo ya subimos al aparcamiento de la pared de Zaratustra, al que estaba casi apunto de tocar el sol (11h), pero por suerte, al otro lado de la carretera si que lo hacía y así nos pudimos equipar con buena temperatura. Después ya tocó la corta pero intensa aproximación:
Al llegar al pie de vía, ya vimos que nos tocaría escalar buena parte del primer largo aún a la sombra. Se animó Ismael a comenzar y controlando mucho, sobre todo por los tramos 'sobados', consiguió llegar sin prisas, pero sin pausas, a la R-1 a los 30 metros.
En el primer largo...
... y en la R-1...
Al recuperar el largo, en el tramo anterior a la sección más difícil (V+), tuve un resbalón que ya me dejó 'tocado' anímicamente para el resto de la vía. El paso de entrada a la reunión con las indicaciones de Ismael aún lo pude resolver sin más problemas. Jordi que venía detrás, no tuvo problemas, pero también controlando a tope. Siguió Ismael con el segundo largo, con roca en mejores condiciones y con dificultad más asumible (IV+), aunque con un tramo antes de la R-2, donde hay que apretar algo más (V ó algo más), y llegando a la misma a los 25 metros.
En principio llevaba la intención de escalar de primero el tercer largo, pero ya viendo como estaba, preferí que ya Jordi escalara de primero los dos largos que quedaban, El tercer largo, que tiene un primer tramo vertical también algo sobado (IV+/V), después sigue vertical, pero con mejor roca (IV+) llegando a los 25 metros a la R-3.
En el tercer largo...
... en la R-3...
Y llega el cuarto largo, que cuenta con el paso más duro de la vía y que fue el que me tocó equipar cuando abrimos la ruta hace 31 años. Jordi lo resolvió sin excesivos problemas , aunque mirando mucho los movimientos a realizar, dado el estado actual de la roca, sobre todo en los 3/4 últimos metros del mismo y llegando a los 20 metros a la R-4. Después cada uno como pudimos acabamos este último largo.
En el cuarto largo...
,,, en la R-4...
Empezamos el descenso con la intención de bajar con 3 rápeles (de R-4 a R-3, de R-3 a R-2 y de ahí al suelo), pero un liada de cuerdas en un árbol nos obligó a efectuar los cuatro rápeles. Al empezar a recuperar el último rápel, también nos dio un pequeño susto al parecer que no corrían las cuerdas, pero afortunadamente sólo fue eso.
Rapelando la vía
Para redondear la jornada nos fuimos directos al Cirera a darnos el oportuno homenaje y con la consabida tertulia , los tres coincidimos que posiblemente ya no la volveríamos a escalar.
Un comentario de Jordi sobre la existencia de unos mapas que originalmente Alpina había elaborado para les Bombers, plastificados para protegerlos en caso de lluvia y que al parecer ahora se fabrican en formato de tela y que permite que se mojen y lavarlos las veces que se quieran, me hizo interesarme sobre el tema y que conste que no tengo comisión:
En resumen un finde bien aprovechado, teniendo en cuenta las previsiones que habían habido, y compartido en buena compañía.