Este finde tocaba ir a una salida de la AEC con el fin de comprobar sobre el terreno, la logística necesaria para la "Cursa d'Alta Muntanya La Ribalera" (1ª edición) que organizamos este año dentro de los actos del 100tenari. El recorrido transcurre por un bello entorno, que me atraía, ya que no había ascendido a ninguno de los picos que se ascenderán en la prueba (17/6/12). Me asignaron el punto culminante del recorrido: Pic de Salòria (ó Bony de Salòria) de 2789m y que es el "sostre comarcal" del Alt Urgell. El trayecto a recorrer es de 39 kms. y +2800m de desnivel.
Mapa del recorrido de La Ribalera
Perfil del recorrido
En la cima del Salòria
Para conseguir acceder más cómodamente, dormimos en Os de Civís (población que pertenece al municipio de Valls de Valira con único acceso asfaltado desde Sant Julià de Loria-Andorra), las 8 personas que accederíamos al Salòria, Coll de Conflent y Bordes de Conflent. El resto de personal, aproximadamente unas 25 personas, accedieron desde Tírvia, que será el punto neurálgico de toda la organización y donde inicia y acaba la prueba.
El domingo a las 12h estábamos todos en los diferentes puntos de control para verificar las comunicaciones y poder tener un conocimiento más amplio de lo que tendremos que hacer cada uno el día de la prueba.
Por la tarde nos reunimos todos en Tírvia para efectuar cambio de impresiones entre todos y así poder tener todo más claro.
Por la noche volví para casa y, tal como habíamos quedado, llamé a Mika para ver que podríamos escalar el lunes. Sin una idea clara nos dirigimos a El Bruc para desayunar y aclarar el plan. Nos encontramos con Oskar y sus colegas, que tenían intención de ir al Totxo Ponent.
Nos decidimos por ir a la cara oeste de La Pastereta para hacer inicialmente las vías deportivas que abrieron en 2010 J. Vidal e I. Notivoli a la izquierda de la Havana Club y según las ganas hacer alguna cosa más.
Mika en el tramo inicial de Orella d'ós
En la aproximación me dí cuenta que me había dejado los pies de gato, pero por no estropear el plan, seguimos hacia arriba. Con esta situación decidimos empezar por la "fácil": Orella d'ós, que según la reseña de la nueva guía de Luichy es un Vº de 30m. El inicio ya le dió malas sensaciones al compañero Mika, y aunque el primer seguro ya está un poco alto, los tres siguientes están a una distancia razonable en una vía de escalada deportiva, aunque la dificultad puede que sea algo más que lo reseñado. A partir del quinto parabolt la dificultad decrece y se va tumbando y es entonces cuando hay una "excursioncita" para llegar al siguiente seguro y fue aquí donde por mala suerte al traccionar ligeramente de un gran "bolo", éste se salió, lo que provocó un vuelo de más de 10m rebotando por la rampa y que casi me diera de pleno con el mencionado bolo.
Enseguida Mika reaccionó y me comentó que le hacia daño la mano. Al descolgarle y llegar al suelo enseguida vimos que tenía un amplio corte sangrando en la palma de la mano y la parte del pulgar bastante inflamada.
Una primera limpieza con agua antes de emprender el descenso, que ya tuvo su "gracia" ya que un resbalón que hubiera podido provocar que pusiese la mano en el suelo, hubiese sido bastante delicado.
Fuimos al médico de El Bruc y tras una primera revisión, aconsejó que nos desplazáramos al hospital de Martorell para que le hicieran radiografías para descartar una posible fractura de hueso. Después de que se las hicieran, descartaron que tuviese fractura de hueso y que posiblemente sólo se tratara de una fuerte contusión, así que ahora le tocará estar unos días de reposo, que espero que sean pocos...
En el hospital mientras esperábamos para que le hicieran el reconocimiento, me comentó que ya en los primeros metros de la vía tuvo "malas vibraciones", que luego se confirmaron. Desde luego a veces más valdría no levantarse de la cama...