El miércoles recibí whatsapp de Susana E. para ver si el domingo podíamos hacer lago y que según como viéramos la evolución del tiempo decidiríamos a última hora. El viernes también dio señales de vida Montse, de la misma forma y así nos volveríamos a ver después de la última escalada conjunta en 'Malanyeu'. Acordamos que cada cual iría mirando posibilidades y que el sábado a última hora cuadraríamos el plan.
Después de regresar de 'Banyadores' empecé a mirar las previsiones y apuntaba, por ejemplo, en Montserrat, que hacia las 12:00 podría descargar algo. Con esto y lo acontecido el viernes, parecía que lo más prudente sería buscar algo de deportiva que no tuviera demasiada aproximación y que también tuviera vías que pudiéramos hacer.
Fue Montse la que planteó el ir al 'Clot del Boixar', al que hacía 9 años que no acudía, que en aquella época podías dejar el coche en las cercanías de El Castell. Susana también le pareció bien y en su caso además sería su estreno ya que no había estado nunca. El recuerdo que tenía de la última visita fue el de un escalador que estaba asegurando a su colega con el grigri con los brazos cruzados y sin coger la cuerda.
Quedamos en Cal Anna para tomar unos cafés y acabar de concretar y como es habitual encontramos algun@s conocid@s. Como Montse está más al día de las zonas de deportiva de Montserrat, tenía controlado la mejor forma de acceder al sector, lo cual desde luego ya es una ventaja.
La aproximación ahora es de más del doble, pero tampoco una exageración
(La antigua de la guía Montserrat Cara Sur de 2004 y la nueva mapa Alpina)
En la aproximación nos encontramos con un grupo que iba a escalar en El Castell y otro que iban de paseo. No tardamos en tomar el desvío que con fuerte subida ya nos lleva al pie de la Agulla de la Mosca y fuimos hacia la derecha para situarnos en las vías de más a la derecha de la Placa Gunilla.
Panorámica desde el antiguo aparcamiento
Se notaba el ambiente muy cargado, lo cual hacía pensar que se iban a cumplir los pronósticos y que solo faltaba saber a que hora.
Mientras desplegábamos el material vimos que venía otra cordada que entre ellos hablaban en inglés y que fueron al sector próximo '
Cony de Pedra', el siguiente a la derecha de la Placa Gunilla.
Empezamos por la de más a la derecha, que según recordaba era la mejor para comenzar y se animó Montse a comenzar (o mejor dicho, la animamos), al estar más rodada y sin problemas resolvió los 12 metros de esta vía sin nombre y asegurada con 4 bolts.
En la vía sin nombre de más a la derecha de Placa Gunilla
La escalamos los tres y el tiempo cada vez estaba más negro. Volvió Montse a escalar la siguiente vía a la izquierda que acaba en el mismo descuelgue que la vía anterior, con igual longitud (12m) y número de bolts (4), pero personalmente pienso que un plus de dificultad. Cuando la escalé ya me lo tuve que mirar y al llegar al descuelgue y bajar, justo a las 12:00 se cumplió el pronóstico y empezó a llover. Suerte que aún no habíamos estirado la cuerda y a Susana le tocó escalar en top rope aguantando la fina lluvia.
En la vía siguiente a la izquierda
No fue mucho lo que llovía, pero ante el temor que pudiera caer algo parecido a lo del viernes, y antes de que se mojara más la cuerda y el material, optamos por plegar y ya que estábamos por allí nos llegaríamos hasta la Cova del Boixar. Antes de marchar me fijé que las dos vías siguientes a la izquierda (La Sra. María y La Sra. Gunilla) habían han sido equipadas en 1992 y requipada en 2005 por el propio Pere Forts, que tristemente el viernes pasado nos dejó.
Llegamos a la cueva y ya no recordaba que es como si fuera un duplex con dos pisos a diferentes alturas y protegidos con ventanas.
Mientras habíamos tomado los cafés por la mañana, no se el motivo, salió en la conversación de un par de vías en el Turó de Cal Beco, equipadas por Esteve Margenat, cuyos nombre son: 'Dos churris con un abuelo' y 'Un abuelo con dos churris', y bromeamos sobre la coincidencia de la cordada de este domingo.
Las dos 'churris' en la puerta de la Cova del Boixar
Dejamos las mochilas en la cueva y nos acercamos hasta el sector '
Congost' que en agosto de 2013 visitamos con Mika y Montse. Había solo una cordada de tres escalando una de sus atléticas vías y me vinieron muchos recuerdos de aquel día.
En el Congost en 2013
Volvimos hacia la cueva y oímos que se acercaba alguien hacia allí y resultaron ser dos infatigables escaladores del Osona: Miquel y César que habían llegado allí de rebote al no haber encontrado el sector Columpi en el Faraó de Baix. Mantuvimos una buena conversación y ellos se fueron a escalar al Congost, mientras que nosotros optamos por regresar y tomar algo en Cal Anna.
De regreso las panorámicas desde el antiguo aparcamiento
En el bar nuevamente sirvió para que encontrásemos algun@s conocid@s y que sirvió para ponernos al día. En resumen que poco hemos podido escalar, pero que al menos ha servido para pasar buenos momentos en buena compañía.
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