diumenge, 30 d’agost del 2020

Acabando las vacaciones con un par de vías a La Formiguera: La Colá y Memòria selectiva

Habíamos planeado con Jordi F. realizar una escapada por el Piri para el viernes y sábado, pero viendo las previsiones nefastas que ya se daban para el viernes por la tarde, decidimos en quedar el sábado para hacer una salida rápida a Sant Llorenç de Montgai/Camarasa, donde parecía que iba a estar toda la mañana cubierto. Si el tiempo hubiera sido soleado siempre teníamos plan 'B' para ir hacia el Dispensari o alguna de las paredes vecinas. Contactamos también con Pepe y Roger y acordamos almorzar en Cal Pere para acabar de cuadrar el plan.

En el viaje pasamos zonas en las que el sol estaba ya asomando como cualquier otro día de verano y ya nos hacía temer lo peor, pero a medida que llegamos a Camarasa las nubes eran presentes con la suficiente consistencia para ocultar el sol en todas las paredes, pero sin aparente riesgo que pudiera avanzar las anunciadas lluvias. Mirando reseñas mientras tomábamos los cafés surgió la posibilidad de volver escalar una bonita vía:

Y si habían más ganas escalar alguna de las contiguas:


Fuimos hacia el habitual aparcamiento y alguna furgo había, pero después comprobamos que nadie decidió ese día ir a La Formiguera, así que teníamos toda la pared disponible, Acordamos que irían de cordada los 'lugareños' Pepe y Roger y con Jordi haríamos la otra habitual cordada. Tuvieron el detalle de dejarnos pasar y sin más problemas escalé el primer largo y posteriormente al subir Jordi ya le fue siguiendo Pepe. Este largo comienza justo a la izquierda de Memòria selectiva y después de un tramo vertical de IV y tres chapas, sigue en diagonal a la izquierda donde se cruza con la Sabina Wall. Se sigue con ligera tendencia a la derecha y después de otro resalte alcanzamos la R-1 a los 35 metros en una repisa en la que a su izquierda veremos la R-1 de la Vía del Barbes.








Mientras Jordi inicia el 2º largo, Pepe se instala cómodamente en la contigua R-1 de la Vía del Barbes

El segundo largo de La Colá  inicia en diagonal a la derecha, no debiendo confundir los seguros que siguen recto y que pertenecen a la Vía del Barbes. A medida que se van ganando metros crece la verticalidad y la dificultad, llegando a un pequeño resalte algo desplomado donde encontramos la máxima dificultad (V+) y siguiendo aún con tramos verticales pero con más canto ya alcanzamos la plataforma donde acaban también Sabina Wall y Memòria selectiva, viendo alguna reunión en el suelo, pero hay que seguir gasta el pie del resalte que ya nos lleva a la arista cimera encontrando la R-2 en una posición algo elevada a los 40 metros, que después permite poder en un sólo rápel de 60 metros llegar nuevamente a pie de vía.

Jordi en el segundo largo
Mientras Asegurando desde la R-1, cada uno a su compañero...

Cuando llega Jordi a la R-2, Roger también ha llegado a la R-1 y tal como inicio para recuperar el segundo largo, me sigue manteniendo la distancia de seguridad.

Roger entrando a la R-1...
...y en el segundo largo...
Xavi llegando a la R-2...
...Roger llegando a la R-2...
...y Pepe acabando la faena...

Foto cima de las dos cordadas

MIentras subían Roger y Pepe ya habíamos preparados las cuerdas para lanzar el rápel, así que lel descenso fue rápido, ya que mientras rapelábamos con Jordi, ellos plegaron sus cuerdas y después nos reunimos nuevamente los 4 en la base de la pared.


Un largo rápel de casi 60 metros nos permite llegar al suelo...

Jordi propone que escalemos Memòria selectiva y Pepe comenta que prefiere reservarse, así que con Roger y conmigo haremos cordada de tres. Curiosamente con Roger aún no habíamos compartido cuerdas, aunque si que escalamos la misma vía en la 'No es no' de Abella de la Conca.

Reseña tuneada de 'X. Larretxea'

Aunque se pueden enlazar largos, optamos por escalar la vía tal como se equipó con tres largos y así de esa manera podíamos escalar uno cada uno, de manera que nos repartimos y para mi el primero, para Roger el segundo y para Jordi el tercero.

Escalé el primer largo (IV-) tal como indica esta reseña, montando reunión a los 25 metros de dos parabolts que hay sin argollas, aún casi es más práctico continuar unos 8 metros más arriba donde encontramos otra reunión, que está con argollas.

Roger en el primer largo
Jordi en el primer largo
Roger y Xavi en la R-1

Cambiamos cuerdas y continua Roger que sin problemas resuelve los 30 metros de este segundo largo con un tramo más técnico de V en la parte final del mismo.




Escalando en el segundo largo

Nuevamente cambio rápido de cuerdas para que Jordi acabe la faena y sin problemas resuelve este tercer largo de placa vertical y con pasos atléticos, montando la R-3 en lugar de su enclave incómodo en el suelo, la R-2 de La Colá y así también ahorrar maniobras para el descenso.




Y rematando con el tercer largo...

Rapelamos nuevamente de la misma forma y nos reunimos con Pepe y sorprendentemente el tiempo para que en lugar de empeorar, se estaba abriendo, con lo que así como escalando tuvimos muy buena temperatura, de regreso al aparcamiento casi tuvimos calor. Llegamos al aparcamiento y rápido nos dirigimos a Cal Pere, primero para reponer líquidos y después ya para comer algo. En la tertulia también se nos unió Marc, poniéndonos al día y hablando de algún futuro plan.

En resumen la última salida de mis vacaciones que este año han sido bastante extrañas y algo condicionadas a las circunstancias. No es que fuera un gran día de escalada, pero al menos compartimos buenos momentos en buena compañía, que es lo importante...

Nada mejor para acabar un buen día...









dimecres, 26 d’agost del 2020

Otro par de escaladas estivales relajadas por Ca la Montse: Incondicional dels Dimecres y Ulu-Apa

El sábado acordamos con Jordi F. de escalar algo por Montserrat y al comentarle que el día que con Jordi C. escalamos la 'Vía Santa Caterina' vimos que un poco antes de llegar a ella, se ha equipado otra vía denominada: Incondicional dels Dimecres y que podríamos ir a probar le pareció bien.


Detalle sobre el recorrido

El día que colgué las fotos en el Facebook de la Vía Santa Caterina me hicieron llegar la imagen anterior con el recorrido de ambas vías, que por cierto coinciden en la parte final. Con esta información y ya sabiendo que su orientación permite escalar aunque sea verano ambas vías, tocando el sol por la mañana sólo en la parte final de las mismas, aunque al estar en una zona que suele estar afectada con ráfagas de viento que pueden suavizar la calor, permite poder escalar sin demasiados agobios. Además los pronósticos anunciaban que estaría nublado hasta el mediodía, así que no dudamos en ir hacia allá.

Tomamos unos cafés en el 'forn' de Collbató y ya nos fuimos hacia el aparcamiento del Área de la Salut. El día estaba nublado pero no parecía que fuera a descargar lluvia y después de ver que en La Codolosa tampoco se veía a nadie, nos equipamos y sin prisas hicimos la aproximación y sin problemas llegamos a pie de vía, marcado con una flecha grabada en la roca y una muy cercana sabina de la que cuelga un trozo de cuerda lazado..

Me animé a comenzar con el primer largo en el que nada más comenzar podemos utilizar el cordino mencionado y una vez superado se puede colocar un flotante tipo Camalot del 1 en una buen fisura, antes de alcanzar otra sabina con otro trozo de cuerda lazado. Un poco más arriba creo que encontramos un clavo y posteriormente un taco de madera, que hace recordar escaladas de hace muchos años. En el tramo del taco se concentra la máxima dificulta del largo (V) y donde mejor no resbalar ya que la caída no sería muy limpia. Después ya un tramo más tumbado hasta llegar a la base de un resalte vertical con un puente de roca equipado con otro trozo de cuerda que permite llegar a la R-1 a los 25 metros, de 2 parabolts. Como referencia esta reunión está al mismo nivel que el tramo de V+ de la Vía Santa Caterina.



En el primer largo
El tramo de V+ de la Vía Santa Caterina


Toma el relevo Jordi con un primer paso en el que hay que prestar atención, aunque sólo marque IV, para llegar a poder alcanzar un clavo a un par de metros. Después se va tumbando e iremos en diagonal a la derecha superando algún que otro resalte y encontrando alguna sabina y puentes de roca equipados con trozos de cuerda, con una dificultad promedio de IV y llegando a los 30 metros a la R-2, de dos parabolts, bajo un desplome anaranjado.








En el segundo largo


Sigo con el tercer largo en el que ya empiezan a verse parabolts, lo cual ya nos hacía sospechar que la dificultad debía aumentar. Inicia con una sucesión de placas verticales para llegar a un primer parabolt (V) y después hay un paso más técnico para superarse y alcanzar un puente de roca lazado con un trozo de cuerda, siguiendo después hasta situarse bajo un desplome con roca a controlar y que en diagonal a la derecha permite llegar a una fisura, en la que en su margen derecho encontramos un parabolt que nos protege para superar un atlético paso en un pequeño desplome (V del bueno), que una vez superado ya por terreno más tranquilo y en diagonal a la derecha, encontrando otro parabolt y llegando a la R-3 a los 25 metros, de dos parabolts y en una cómoda repisa.

En el tercer largo

Sigue Jordi con el siguiente largo y haciendo caso a las indicaciones de la reseña de 'Els Visas' enlaza con el siguiente y el 60 metros llega a la R-5 que coincide con la penúltima de la Via Santa Caterina. Empieza por unas placas de III/IV hasta alcanzar a unos 5 metros un primer parabolt y después en diagonal a la izquierda hasta encontrar un segundo parabolt para proteger un pequeño resalte, después por terreno más tumbado se alcanza a los 25 metros la R-4, de dos parabolts. Desde aquí Jordi siguió recto, pero después nos fijamos que saliendo de dicha reunión en diagonal a la izquierda se ve una sabina con un trozo de cuerda lazado y que desde ahí ya se sigue por la Vía Santa Caterina encontrando sus parabolts correspondientes. Jordi fue más por la derecha y alcanzo el último parabolt de ese largo enclavado bajo un pequeño desplome de roca a vigilar. Desde ahí coincidía ya el resto de recorrido con  su vecina vía alcanzando la R-5 a los 35 metros desde la R-4 ó 60 metros desde la R-3.

Iniciando el cuarto largo
R-4
Panorámica del recorrido desde la R-4
  
Así como con Jordi C. me tocó el último largo de segundo y un tuve un pequeño susto al romperse un canto de pie al superar el pequeño desplome donde está el segundo parabolt, esta vez me tocaba a mí escalarlo de primero y desde luego fui con mucha precaución y esta vez sin problemas alcancé la R-6 a los 30 metros. 



Y en el último largo de Vía Santa Caterina

Este último tramo de escalada tuvimos la suerte de que estaba el cielo aún medio cubierto, pero al poco rato ya se acabó de despejar y pudimos ver como una cordada estaba por La Codolosa y debieron acabar la vía sudando lo suyo. La ventaja de haber escalado tan recientemente la Vía Santa Caterina es que el descenso lo pudimos rápido y sin problemas. Primero efectué el primer rápel de unos 55 metros, uniendo los dos últimos largo de esa vía y después Jordi efectuó el cambio de reunión y después ya enlazó el segundo rápel hasta la base de la pared y con 30/35 se llega al suelo. Después ya es decender por la canal de aproximación utilizando algún tramo de cuerdas fijas y cables antes de llegar nuevamente a pie de vía y regresar utilizando el mismo recorrido que en la aproximación.

En el cambio de reunión para ir a la R-2 Vía Santa Caterina
En el segundo rápel
Y en uno de los tramos de cuerdas fijas del descenso

Llegamos acalorados al aparcamiento y nada mejor que darnos un buen homenaje, en esta ocasión en el Granada con un buen cous cous y como es habitual hablando de algún futuro posible plan...

El domingo contacté con Josep María, con el que recientemente escalamos 'Funció Clorofíl·lica' y acabamos acordando de escalar el lunes por Gorros y una vía de las que me faltaban que él ya había escalado, pero que no le importaba repetir, y viendo la meteo que preveía un día algo nublado y sin excesiva calor, pareció una buena alternativa:


Esta vía me parecía erróneamente que era la única que me quedaba escalar del infatigable Guillem Arias en Gorros y cercanías, donde tiene una buena colección: en la Magdalena Inferior la 'Rataplan' y 'Xiqui' (que aún me falta), la ya mencionada Ulu-Apa en el Ullal de la Magdalena, en la Magdalena Superior '98 Octanos', 'Doc. Antón R.  / Acromion', en la Gorra Frigia 'Ópera Prima', 'Stromberg', 'Òptima', 'Lo Tío Gos', 'El Gruñón' (de esta me faltan los dos primeros largos) y 'Joan Marc', en El Sentinella 'Wagner', en La Paparra 'Balbino López Méndez', en La Cara de Mico 'Infidel', 'Escalada virtual', en la Miranda de Santa Magdalena 'Vía de la Núria' y 'Directa Núria', en el Mirador de Sant Joan 'Integral d'en Pitu i la Nuri' y 'La Torna' (tampoco la he escalado), en la Miranda de Sant Pere 'La Nina / La Piula / La Gateta' (también me faltan). Puede que aún me haya dejado alguna más, así que comprobando datos aún me queda faena...

Optamos por la aproximación relajada con el funicular de Sant Joan y almorzamos en la estación superior. Después ya emprendimos la cómoda aproximación hasta llegar a la base del Ullal de la Magdalena:



Desde el camino sólo queda sortear algo de vegetación para llegar al propio inicio de vía. Como Josep María cuando la escaló hizo de primero las impares, en esta ocasión quedamos que para mi las impares y para él las pares. El primer largo es una rampa en la se van sorteando vegetación y roca delicada y hasta que no encuentras la primera chapa, siempre se tiene la duda de si vas por el camino adecuado. Una vez chapada, ya se trata de ir subiendo con atención hasta encontrar otro par de parabolts (IIIº) hasta llegar a una repisa a la derecha donde vemos una reunión de parabolts con argollas algo oxidados algo alta y depués al advertirme Josep María vi la verdadera R-1, algo escondida por la vegetación, pero en un lugar más cómodo que la otra reunión a los 35 metros y de 3 parabolts amarillos. Escalamos casi todo el largo a la sombra.

Detalle de la R-1
Entrando a la R-1 y panorámica desde ella de la Magdalena Superior

Sigue Josep María ya con el propósito de saltarse la R-2 y seguir hasta la R-3. Aquí ya la roca es de muy buena calidad, comenzando por el margen izquierdo de la reunión y después ya se describe una marcada diagonal hacia la izquierda  (IVº) encontrando 6 chapas antes de llegar a la R-2 a los 20 metros. Después se sigue en diagonal derecha (IV/IV+) hasta llegar a la base del gran desplome donde encontramos la R-3 en una exigua repisa, encontrando otros 3 parabolts, unos 10 metros más arriba de la R-2. En el recorrido se van encontrando algunas piezas antiguas que dan testimonio que por ahí se debía cruzar con alguna vía antigua. En el segundo largo nos tocó algo el sol, pero ya en el tercero volvimos a estar a la sombra.





Uniendo segundo y tercer largos

Sigo con el cuarto largo con un impresionante, mas que difícil (IV+), flanqueo hacia la derecha por debajo del gran desplome, en el cual hay un par de parabolts y algún espit viejo. A partir de auí, los buenos lo pueden escalar en libre (¿6b?) y los demás en Ae, que con un estribo se soluciona más cómodamente, aunque hay algún paso que hay que estirarse. Después de unos metros verticales ya hay que describir una marcada diagonal hacia la izquierda que ya se puede escalar el libre pudiendo trampear si es necesario, hasta llegar a un último resalte antes de llegar a la R-4 a los 20 metros, habiendo encontrado 12 chapas en el recorrido. La roca es de excelente calidad y el equipamiento permite escalar sin demasiado estrés. Todo el largo a la sombra, aunque en la R-4 si te tirabas algo hacia atrás te podía tocar el sol en la cara.





En el aéreo cuarto largo

Tal como llega Josep María ya enlaza con el quinto largo, típico de Gorros, vertical y con 'patatas' suficientes para progresar adecuadamente. Inicia vertical sobre la reunión y después ya va en diagonal a la izquierda (Vº) y ya después va disminuyendo la verticalidad y la dificultad, IV+/IV/III con un último tramo de III donde la roca ya no es tan buena pero al estar bien asegurado tampoco causa mayor problema, llegando a los 25 metros a la R-5 un par de metros por debajo de la cima. En el recorrido 11 chapas. La primera parte del largo a la sombra y la segunda ya al sol hasta la cima.





En el quinto largo
Junto a la cima
Panorámica desde la cima

Como el sol en la cima ya comenzaba algo a apretar, rápido fuimos a buscar el rápel que con unos 15 metros por la cara oeste ya nos deja junto al collado que hace el Ullal de la Magdalena con la Magdalena Superior.


Habíamos hablado de si había ganas escalar también la vía Atila, abierta por Manel Sugranyes y Pepe Guerrero en 1985 y que reequipamos con Jordi Lletche el 25/6/06 con parabolts, no en 2007 como indica Luichy en la guía de Gorros.

Reseña original de Manel Sugranyes

Nos acercamos a pie de vía y vimos que la vegetación ha crecido bastante habiendo casi tapado la entrada de la vía Steve Wonder (6a+ muy peleón que escalamos en el 86 con Ritchie Pelegrina y Pepe Guerrero), que es la de más a la izquierda. El primer seguro de esta vía está bastante alto, tanto como la de su contigua 'Yo no me llamo Javier' (V+ que había escalado en tres ocasiones). Estas dos vías que están a la izquierda de la Atila están aún con el equipamiento original (buriles). Después de haberlas escalado a 'vista' desde el suelo, dimos por acabada la matinal y nos fuimos a El Bruc para darnos un homenaje, pero ni Cal Anna, ni Granada ni Sant Jeroni estaban abiertos y Cal Noio estaba con una cola impresionante, así que acabamos en el Bon Preu de Collbató, dándonos un buen homenaje. 

De bajada foto de la cordada sobre el Monestir

Al pasar junto a la zona de iniciación de escalada en la Agulla de la Font de Jacob, ya comprobamos que se ha cambiado el que estaba muy deteriorado de lo cual en su día informé a la FEEC y al Patronat.

Estando del cartel hace un par de años
Estado actual

Como es habitual aprovechamos para comentar la actividad y plantear algún posible futuro plan. Personalmente la Ulu-Apa me ha dejado un buen sabor de boca a pesar de que tenía alguna referencia no demasiado buena de la misma.