dilluns, 22 d’agost del 2022

Buscando sombra por Turó de Cal Beco y Gorros: Fernando Lajarín / Ana Marisa Correia

 


Tal como hemos sufrido estos días de altas temperaturas, no queda otro remedio que ir buscando vías que estén lo máximo posible a la sombra, incluso como con una matinal que hicimos con Jordi F. al Turó de Cal Beco, en el sector Wild West, donde estuvimos unas 3 horas hasta que el sol ya nos hizo desistir de continuar.

Reseña 'Fernando Micó'
En el aparcamiento ahora hay este anuncio para incitar para después de la escalada...



En Escalo-frío
En Schhol

En Space Oddity

Para el jueves acordamos con Jordi C. y Joaquín R. de subir a escalar la Fernado Lajarín del Gorro Frigi (que había escalado hace 30 años con Josep Emili Ferrer y Toni Seguí) y casualmente íbamos a coincidir en la aproximación con Mamerto y Joan Escuer que querían escalar la '98 Octanos'.

Reseña 'Joan Prumera'

El día estaba con algo de nubes que hacía que la temperatura no fuera tan alta como en días anteriores y al llegar al pie de la Magdalena Superior ya fuimos cada uno hacia su objetivo.


Aproximación sin demasiada calor

Llegamos al pie de vía fácilmente reconocible por los dos buriles que pueden servir de R-0 y teníamos toda la pared para nosotros.


Esta vía que fue abierta por Manel Pedro (Gastón) en 1990 y equipada con buriles y espits, teniendo en reuniones unos que solían usarse en espeleo y que Gastón solía utilizar para reuniones en muchas de sus vías:

En 2010 fue reequipada parcialmente con parabolts por Jordi Pazos y Toni Mateu. Sin ánimo de crítica, vimos que este reequipamiento no se efectuó sustituyendo las piezas antiguas, sino que en algún caso colocando los parabolts en casi paralelo con los buriles, lo cual pudimos comprobar que al mover las cintas con las cuerdas pueden provocar la apertura del mosquetón donde van chapadas dichas cuerdas. En las reuniones si que se agradece que en todas se han instalado dos parabolts con argollas para poder rapelar al menos en las dos primeras.

Joaquín estaba muy animado para ver si conseguía escalarla totalmente en libre (¿6a+?) y con esfuerzo, lo consiguió. En este largo de 30 metros hay emplazados 3 parabolts además de los 15 buriles/espits. El tipo de roca, sobre todo al principio, no es que sea muy adherente aunque el numeroso equipamiento hace que se pueda ir trampeando en caso de necesidad (V/Ao).


Joaquín resolviendo el primer largo
Xavi asegurando
Joaquín asegurando desde la R-1
En la R-1


Y Jordi recuperando el primer largo

Sigue Joaquín con el segundo largo, que inicia en diagonal a la derecha y donde iremos encontrando 7 parabolts y alguna pieza antigua, con una dificultad de IV, llegando a los 35 metros a la R-2.

Joaquín en el segundo largo
Xavi en el segundo largo

Jordi recuperando el segundo largo

En la R-2

Sigue Joaquín con el tercer largo, que es el más fácil (III), pero con algún aleje que pueda hacer plantear dudas de por donde va la vía, y más si te toca el sol en la cara, como nos pasó a nosotros. Se van encontrando algún parabolt, un buril y una reunión que es mejor saltarse, estando la R-3 a unos  30 metros, pero algo a la izquierda de la vertical, y Joaquín no la vio y enlazó parcialmente con el cuarto largo al ver un parabolt en el tramo de IIº. Ante la duda acabó montando una improvisada R-3 de uno de los árboles de la canal. Cuando recuperamos el largo ya enlazamos hasta la R-3 bis, pasando por la R-4 de 'Lo Tio gos'.



Joaquín e el tercer largo
Jordi iniciando el tercero largo

Una vez agrupados los 3 en la plataforma al pie del último largo, ya notamos que no íbamos a pasar calor. Jordi pidió escalar de primero el último largo y sin problemas accedimos. Como en los anteriores largos se van encontrando seguros 'dobles' (parabolt/buril-espit), hasta llegar bajo un resalte en el que al salir el sol le tocaba de pleno en la cara y donde el siguiente seguro queda algo escondido detrás de una piedra. Probó buscar en varias direcciones y finalmente vio más claro desplazarse algo hacia la izquierda y ya enlazar con el tramo final del último largo de la Òptima. Cuando recuperamos el largo vimos las chapas que no pudo ver Jordi y ya nos dirigimos hacia la cima.

Iniciando último largo Fernando Lajarín...
... y saliendo por la Òptima...

Finalizando por la Òptima
De la R-4 fácilmente se alcanza la cima


Fotos cima

Mientras estamos en la cima vemos que Mamerto y Joan están finalizando la 98 Octanos y que ni paran en la cima para rapelar rápido y poder ir a escalar otra vía. Habían comentado como posibilidad el escalar la 'Vía del cabra'

Los compañeros finalizando 98 Octanos

Aunque aún era relativamente tempranos, como habíamos visto los pronósticos de que al mediodía llegarían tormentas, fuimos cautos y optamos por bajar tranquilamente hacia Monistrol de Montserrat para darnos un buen homenaje y nada más hacer el pedido en el bar La Roca, empezó ya a descargar una buena tormenta de agua.


En el primer rápel
Vemos una cordada rapelando de la R-1 de la Vía del Cabra

Vimos una cordada que rapelaban de la R-1 de la Vía del Cabra, que suponíamos que eran Joan y Mamerto.

Y en Monistrol ya descargó con ganas

Alargamos la comida esperando volver a ver a los compañeros para que nos explicaran sus escaladas, pero al ver que no llegaban dimos por hecho que ya habían regresado hacia Ponent. Después por la noche acabé de enterarme de sus aventuras, que consistieron en que fueron a escalar la vía Òptima del Gorro Frigi, que ya la escalaron con sol y tal como llegaron a la cima empezaron a oír que la tormenta estaba empezando a anunciarse con una buena tronada. La última vez que habían bajado del Gorro Frigi aún estaba instalada la 'ferrata' que se había instalado y que posteriormente se desmontó.

La ya desmontada ferrata

Vieron la primera instalación con cadena y anclajes químicos y mientras ya descargaba la tormenta creyeron que con un sólo rápel de 60m podrían llegar a la canal y así lo hicieron, pero lo que no calcularon bien es que después las cuerdas quedaron atrapadas en alguna de las fisuras y acabaron por desistir, abandonar las cuerdas y seguir por el remojado descenso hasta el Monestir. 

Para el viernes me había comentado Joan Bastús que iban a hacer una pequeña colectiva (desde abril en 'Garraf' que no coincidía con ellos) a Gorros y entonces pensé que podría ser una oportunidad para recuperar las cuerdas de los compañeros y finalmente se unió también al plan Jordi F. para escalar una de las que le faltaban en el Gorro Frigi: 'Ana Marisa Correia'.

Reseña original

Reseña con grado más 'real' de 'Joan Asín'

Paramos en Monistrol para tomar unos cafés y mientras esperábamos al resto de compañeros nos encontramos con Joan Pascuti, antiguo socio de la AEC y que compartimos viaje a 'Sardegna', que estaba esperando a sus compañeros de cordada, Agustí P. y 'Alfons E.' con el que habíamos compartido cuerdas en el Ditet y en la Agulla Fàcil. Perdimos el primer funicular con Jordi y al llegar a la base de la cara oeste del Gorro Frigi ya vimos las 2 cordadas de la Òptima (de los compañeros) y una en la Fernando Lajarín. Avisamos a todos que si llegaban antes a la cima que las cuerdas del descenso ya las recogeríamos nosotros. Acabamos empezando los últimos, aunque después acabamos llegando a la cima los primeros.

Desde el camino ya visualizamos las cuerdas a recuperar

Acordamos que Jordi escalaría el primer y cuarto largos y yo enlazaría el segundo y tercer largos y finalizaría con el quinto largo. Empieza Jordi con el primer largo con un tramo de IV+ con roca de parecidas características al primer largo de la Fernando Lajarín, en el que pareciendo fácil, después no lo es tanto. A medida que se va ascendiendo, va disminuyendo la dificultad (IV/III), hasta alcanzar la R-1 a los 30 metros y situada un par o tres de metros más a la izquierda de la R-1 de la Òptima. En este largo las chapas están pintadas de color verde y alguna raya también hay pintada en la pared.

Jordi en el primer largo
Joan B. en el primer largo de la ôptima
Jordi asegurando desde la R-1 y la primera cordada de la Òptima
Recuperando los primeros largos de la Òptima y la Ana Marisa Correia
Asegurando desde la R-1 de la Fernando Lajarín

Tal como llego sigo para enlazar los dos siguientes largos, encontrando sólo un par de los parabolts del segundo largo  (III) y a partir de la R-2 que está a unos 25 metros, sí encuentro unos 8 parabolts del tercer largo (IV), alcanzando finalmente la R-3 de dos parabolts con argollas pintadas de color lila, y anos 50 metros desde la R-1.

En el segundo largo
En el tercer largo
Y los vecinos ya en el segundo largo de la Òptima

En la R-3

Recuperando el tercer largo

Recupera ambos largos Jordi y ya sigue con el potente y atlético cuarto largo, que sorprendentemente en la reseña original está cotado de Vº, y que su primer parte bien puede ser 6a+, pasando luego a V+ y finalmente un tramo de V, pero ya llegando con los brazos bien 'contentos'. Jordi consiguió trabajarlo bien y consiguió pasarlo limpio y en mi caso, trampeando donde hacía falta.


Jordi en el cuarto largo
Mientras la primera cordada de la Òptima en el tercer largo




Recuperando el cuarto largo

Y los vecinos acabando su tercer largo

Recupero el cuarto largo y breve descanso en la R-4 antes de emprender el quinto largo, que inicia con un tramo de IV+/V para llegar bajo un resalte desplomado y con apariencia de roca 'sospechosa' que actualmente al haber pasado más cordadas ha quedado algo más saneado que cuando la escalamos hace tres años (En libre ¿6a/b? no obligado) llegando a los 30 metros a la R-5, contigua a la R-4 de la Òptima.



En el quinto largo
Asegurando desde las R-5 y los vecinos desde su R-4
Jordi recuperando el quinto largo y en la Cara de Mico vemos a Alfons E.
Foto cima
El vecino de la Òptima parecía que aún quería subir más...

Unos instantes de descanso y al ver que empiezan a salir más cordadas, nos dispusimos a emprender el descenso para liberar las cuerdas y fuimos los primeros en comenzar el descenso y fraccionando en dos rápeles, con las propias cuerdas abandonadas conseguimos llegar a la canal y plegar las cuatro cuerdas que nos tocaría acarrear hasta el Monestir.

Así habían dejado sus cuerdas los compañeros después de intentar recuperarlas

Y emprendimos el descenso hacia el Monestir 

Descendiendo por las escaleras hacia el Monestir nos cruzamos con unos cuantos turistas que sólo viendo su equipamiento no sorprende que después se tengan que hacer tantos rescates. Al llegar al aparcamiento pudimos ver uno de los helicópteros rojos de los GRAE que estaba trabajando para sacar una persona del Cami de les Aigües.

Bajamos nuevamente al Bar la Roca de Monistrol y nos acabamos encontrando nuevamente a Joan Pascuti, Alfons E. y Agustí P. y a última hora también con Montse.

En resumen unas escaladas en buena compañía y buscando evitar el máximo posible que nos tocara el sol...