El tercer día pareció que Jordi le había funcionado el reposo, pero fuimos prudentes eligiendo una vía que ya habíamos escalado en '2016'cercana a la del primer día: Adios Trépidentes.
Panorámica del sector Raclure
Reseña de la última guía editada por J. M. Cambon
Nuevamente poca aproximación y sin ninguna dificultad para encontrar aparcamiento en Ailefroide. Nos equipamos y efectuamos la aproximación sin problemas. Al llegar a pie de vía vimos una cordada germana que estaban en el primer largo. Esperamos que ya estuvieran los dos en la R1 y Jordi se pidió la primera parte de la vía y sin problemas le dejamos hacer. El primer largo tiene unos metros iniciales intensos de adherencia con micro cantos de manos (5b+) que al cogerte en frío ya te hace ir alerta. Después ya se tumba y baja la dificultad progresivamente (5a / 3b), llegando a la R1 a los 25 metros en una buena repisa.
Pie de vía
En el primer largo
Una vez llegamos a la R1, continuamos con Assumpció hacia la izquierda por la vira caminando hasta llegar a la R1 bis, unos 10 metros más allá.
En el cambio de reunión
R1 bis
El segundo largo mayoritariamente es de placa técnica, eso si muy bien asegurado y de una dificultad de 5c/c+ en su primer tramo y después cuando ya se inicia una diagonal a la izquierda decrece progresivamente la dificultad (5b), llegando a la R2 a los35 metros.
En el segundo largo
En la R2 consultando la reseña
El tercer largo empieza con un breve resalte de 5a para posteriormente ir en diagonal hacia la izquierda por terreno más tumbado (3b) y sorteando tramos de bosque, llegando a los 30 metros a la R3.
En el tercer largo
Cordadas evolucionando a nuestra izquierda
Efectuamos cambio de cuerdas para poder seguir escalando de primero la segunda mitad de la vía. Cuarto largo que inicia por una sucesión de placas (4c/5a) que permiten llegar a un resalte final más vertical en diagonal a la derecha (5c) con un paso técnico al principio y después va decreciendo progresivamente la dificultad hasta llegar a los 30 metros a la R4, en una repisa no demasiado cómoda.
En el cuarto largo
El quinto largo empieza zigzagueando (5a) por unas placas para ir a buscar hacia la izquierda un bonito espolón (4b) hasta llegar a un pequeño collado al pie de un último resalte (5b) antes de llegar a la R5 a los 3o metros. En ese collado casi tengo un buen susto al pisar una placa que parecía de tierra firme y de repente me encontré hundido hasta la cintura y con las piernas colgando en el vacío. Después de conseguir salir del agujero ya conseguí llegar sin más problemas a la reunión.
Ya sólo queda una fácil trepada sorteando vegetación y algún bloque para llegar a los 20 metros a alguno de los árboles bajo el camino de La Draye donde montar la R6.
Reposamos un rato después de recoger cuerdas y material y ya emprendemos el descenso que también conocemos del camino de La Draye. Al llegar al aparcamiento aún localizamos a alguna cordada en el tramo superior de la vía.
Escaladores en la parte superior de la vía
Siguiendo la tradición picamos algo en el bar del camping comentando la actividad del día y ya comenzando a planificar la actividad del día siguiente en la que queríamos conocer una zona que poco conocemos en el Queiras.
Muñeco de madera rapelando en Pelvoux
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