dimarts, 19 d’abril del 2022

Espinalbet-Santuari de Corbera: Cinglera dels Esqueis

 

Para el domingo acordamos con Josep María (ya repuesto del susto del 'Pas Nou') y Jordi F. de subir a escalar nuevamente a la 'Cinglera dels Esqueis', donde estuvimos hace un par de años y donde aún nos quedaban algunas vías para escalar.

Con la calor que padecimos viernes y sábado, dábamos por hecho que se iba a repetir la situación. Recogimos a Josep María en Monistrol M. y paramos en Cal Rosal a almorzar. Allí temperatura de 12º, que pensamos subiría progresivamente. Con los cafés revisamos la reseña de Joan Baraldés ('Junio 2020') para comprobar las vías que podríamos escalar.


Optamos por la Aresta de Corbera y la Joan Francesc enlazando con la Bona Feina, según vieramos las ganas y la meteo. En el acceso ya vimos que las obras que nos encontramos en la anterior visita en el Santuari de Corbera ya están finalizadas. Como en la anterior vez, aparcamos a unos 5 minutos más allá de las vías, para no entorpecer el paso en la pista a vecinos o posibles vehículos de emergencias. Mientras estábamos preparándonos apareció otro coche con una cordada de tres escaladores, uno de ellos Ramón Samarra, compañero de Joan Asín en algunas de sus escaladas.

La temperatura no era muy alta y el viento cuando soplaba hacia que nos tuviéramos que arropar, lo cual nos pilló algo desprevenidos, dadas las temperaturas de los días anteriores.

Nos dirigimos a la base de la Aresta de Corbera, mientras que la otra cordada iban a la Escaladors Bucòlics. Se animó Jordi a comenzar la escalada y con un inicio sencillo, hasta llegar bajo un primer resalte con cantos romos que su superación parecía más de lo graduado (V+), aunque la ubicación de un parabolt facilita la labor en caso de necesidad de trampear. Un pequeño tramo tranquilo y se llega a un segundo resalte de parecidas características al anterior. Una vez superado este segundo resalte, barra el paso un desplome que se esquiva por su izquierda siguiendo por una sucesión de placas, encontrando una primera reunión que sirve por si sólo se quieres escalar en plan deportiva y se lleva cuerdas de 60m. Si no lo mejor es seguir, hasta encontrar a los 35 metros La R-1.

En el primer resalte
En el segundo resalte y esquivando el desplome por su izquierda

Y se continua hasta llegar a la R-1

Ramón Samarra en el primer largo de Escaladors Bucòlics

Xavi y Josep María recuperando el primer largo

El viento no aminoraba y ya teníamos claro que al acabar la vía iríamos a buscar más ropa al coche. El segundo largo, que también lo encabezó Jordi, inicia por una grimpada hacia la izquierda para esquivar una canal que separa dos tramos de la pared, en dirección a una cuerda fija que permite llegar al primer parabolt, Este largo va superando pequeños resaltes hasta llegar a un buen desplome, que por su margen derecho permite superarlo sin demasiados problemas (V) hasta llegar a la punta de una aguja donde esta instalada la R-2 a unos 35 metros. Comparativamente este segundo largo nos dejó mejor recuerdo.


Jordi iniciando el segundo largo y asegurándole desde la R-1
Mientras Ramón S. escala el segundo de Escaladors Bucòlics



Mientras Jordi llega a la R-2
Y los vecinos asegurando a Ramón S.



Xavi en el segundo largo
Jordi asegurando desde la R-2



Josep María en el segundo largo
Y unos parapentes sobre las antenas
Y panorámica de Espinalbet desde R-2

El viento hace que no queramos permanecer mucho tiempo en la cima, así que cuando Josep María llega a la R-2, Jordi empieza a conducir las cuerdas para poder llegar nuevamente a la R-1 sin meterse por la canal pero las cuerdas hacen de las suyas y se queda una de ellas algo enganchada en una fisura, hasta que al bajar Josep María la puede liberar.






En el primer rápel de Aresta de Corbera 
Y los vecinos recuperando cuerdas del primer rápel de Escaladors Bucòlics
En el segundo rápel Aresta de Corbera
Y los vecinos en su segundo rápel

Jordi va al coche a recoger más ropa, mientras los vecinos ya nos dicen que han tenido suficiente. Nos vamos hacia nuestro segundo objetico que era la Joan Francesc, que en principio sólo tiene un largo de 30 metros, y esta vez seré yo quien la inicie. La entrada tiene un primer resalte con un pequeño desplome que ya te hace apretar (V/V+) y después en diagonal a la izquierda y sorteando vegetación se van superando diversos resaltes hasta llegar a los 30 metros al descuelgue.




Xavi en Joan Francesc
La ubicación de la reunión no ofrece duda







Josep María y Jordi escalando la Joan Francesc

Como el viento parecía haber amainado acordamos proseguir y seguí con la itención de enlazar con el segundo largo de la Bona Feina. Chapo algún anclaje hasta llegar a una vira donde por sorpresa veo que hay dos líneas de chapas que salen de ella. Opté por la de la izquierda, que resultó ser la de la Bona Feina y después en casa ya descubrimos que era otra variante abierta por Joan Baraldés. A los 30 metros ya llegué a la R-2 de Bona Feina y recuperé a los compañeros.



En la R-2 de Bona Feina y 'reseña actualizada'

Josep María saliendo por Bona Feina
Y lo mismo Jordi

Nos reunimos los tres y no tardamos en empezar a organizar el descenso, algo delicado por la numerosa vegetación existente. Baja Jordi primero y rapela hasta el descuelgue de la Joan Francesc.

Josep María en el primer rápel


Rapelando la Joan Francesc
Y la foto de la cordada del día ya en la pista

Ya nos dimos por contentos con la actividad y nos dirigimos hacia Berga para darnos un buen homenaje, para de paso comentar la actividad y algún posible futuro plan.

















 



1 comentari:

Jaumegrimp ha dit...

Una raconada divertida aquesta, ja les haureu fet totes !