dimecres, 17 de novembre del 2021

Sábado primaveral en La Codolosa y domingo invernal en Pic de Castellàs-Serrat del Poll

Esta semana se fueron barajando diversas posibilidades para encontrar compañeros de cordada para los dos día y al final acabó cuadrando que para el sábado quedáramos con Ismael M., que no nos veíamos desde hacía tiempo y acabamos por quedar para escalar una matinal, de nuevo en La Codolosa, en la que la última vez escalamos 'Campions y Joan's'. El clima parecía que nos iba a dar una tregua y aunque a primera hora hacía algo de fresquillo, finalmente acabamos escalando casi en mangas de camisa con 19º. Fuimos hacia la pared con varias reseñas y al pasar bajo el sector 'Any de traspàs/29 de Febrer' y comentar con el compi si había escalado esas vías, pareció una buena opción. Estaba tan entusiasmado Isma de poder volver a escalar, después de una temporada en fuera de juego, que no dudé dejar que fuera escalando ambas vías de primero.

Reseña original de '29 de Febrer' de Joan Baraldés

Reseña original de 'Any de traspàs'
Reseña de 'Any de traspàs' de Joan Asín

Al llegar a pie de vía vimos alguna cordada en las vías deportivas que hay más a la derecha:


Empezamos por la menos difícil '9 de Febrer', empezando más a la izquierda de lo que tocaba, para después ya estar en el pie de vía de 'Any de traspàs' que ya cuenta con un tramo de placa bastante técnico que parece un Vº 'muy ajustado' y que al cogerte casi en frío, te hace poner en alerta máxima. Después al no cuadrar los metros y se saltó la R-1 y siguió unos metros más arriba montando la R-1 de los dos parabolts primeros del segundo largo, advertido por uno de los escaladores que estaba en las vías deportivas. Después ya sin problemas siguió con el segundo largo con un bonito paso de bavaresa al inicio y un tramo de placa al final interesante.


En el primer largo de 29 de Febrer
En el segundo largo de 29 de Febrer

En la parte final del segundo largo nos despistaron unos parabolts i algún clavo  visible y con una flecha picada en la base, que al parece corresponden a una vía antigua que al parecer ha sido ¿restaurada?. Desde la R-2 con un largo rápel de casi 60 metros, llegamos de nuevo a pie de vía:

Rapelando 29 de Febrer

Al llegar al suelo vemos que había una cordada dispuesta a comenzar a escalar la vía que acabábamos de descender y resulta que era Josep C., que fue uno de los instructores que nos dieron el curso de formación para Instructor de Escalada en Roca de la ECAM, y con el que hacia años que no coincidíamos. 

La cordada que nos relevó en la vía

Comienza Isma con Any de traspàs, y aunque se lo tuvo que repensar, consiguió pasar limpio el 'teórico' V+, de placa muy técnico. Después sigue un tramo tumbado de IIIº en diagonal a la izquierda hasta llegar a otro resalte que con una dificultad de V ya nos conduce a los 40 metros a la R-1.




En el primer largo de Any de traspàs

Recuperé el largo superando con algún problema el paso clave, y al llegar a la R-1, sin más dilación continuó Isma con un corto resalte de placa (V), a la derecha de un diedro para después salir caminando hasta el pie del último resalte, recorriendo en paralelo los últimos metros y algo más a la izquierda que el recorrido anteriormente con 29 de Febrer. Tramo técnico V/V+ estando la dificultad máxima casi en el tramo final. En la R-2 aún coincidimos con los compañeros de la 29 de Febrer, que ya estaban recogiendo material y cuerdas para disponerse a bajar caminando por la Drecera de Fra Garí. 

En el segundo largo de Any de traspàs

Recuperé el largo con mejor estilo que el anterior y al llegar a la R-2, decidimos volver a descender con un solo rápel y sin problemas llegamos de nuevo a la base de la pares, donde estuvimos un rato disfrutando del buen sol que lucía y ya nos dimos por contentos con la actividad efectuada y así poder dedicar la tarde para otros menesteres. Quedamos que no será la última vez que compartamos cuerda y recordando el gran viaje que compartimos en el 87, en mi primer viaje a Perú y conmemorando el 75 aniversario de la A.E.C.



Para el domingo volvimos a coincidir con Josep María y Jordi F. para escalar en 'Alòs de Balaguer' y quedamos en Artesa de Segre para almorzar y reubicarnos en un sólo coche. Mientras tomábamos los cafés acabamos de concretar la escalada y optamos por repetir por tercera vez con Jordi, que para Josep María era la primera, una buena combinación de vías:



En el viaje desde Barcelona ya vimos que el clima iba a ser bastante diferente al sábado, con bastantes nubes y nieblas y al llegar al aparcamiento ya era cuestión de abrigarse. Sólo vimos un par de cordadas iniciando la 'Olga Frontera'.

El camino de aproximación lo encontramos más tapado de vegetación que las últimas veces, entre las lluvias y las restricciones que hubo en primavera por la nidificación de algún buitre, al circular menos personal, la naturaleza a seguido su curso. El cielo encapotado, pero sin viento, al  menos en la primera parte de la escalada estuvimos a cubierto y con buena temperatura.

Empezó Jordi con el primer largo que ya cuenta con un primer paso de 'V duro' protegido con un parabolt, seguido de una especie de canal en diagonal a la derecha hacia una buena sabina con un cordino lazado, que lo sustituimos, y después un tramo vertical de V con buen canto y un par de parabolts, llegando a los 30/35 metros a la R-1 de dos parabolts con argollas.




En el primer largo de Sueño vertical al Talós...
... y en la R-1...

Tomo el relevo Josep María para seguir con los próximos dos largos. El segundo largo va recorriendo una sucesión de placas de una dificultar de IV+/V en el que se van encontrando 4 parabolts hasta llegar a una especie de punta de la que deberemos descender para alcanzar una vira entre árboles en la que encontramos la R-2 de dos parabolts con argollas a los 25/30 metros.



En el segundo largo de Sueño vertical al Talós

Llegando a la R-2 vemos que hay un gran número de buitres sobrevolando sobre nosotros, pareciendo que nos habíamos convertido en su atracción del día:



El tercer lago empieza sorteando hacia la derecha un pasillo entre la vegetación superando un primer resalte de IV con un parabolt algo elevado, seguido de un tramo más ramposo para continuar con algún resalte con algún paso vertical con canto redondeado donde hay que esforzarse (IV+/V) encontrando otros3/4 parabolts más y llegando a los 40 metros a la R-3 de dos parabolts con argollas.


En el tercer largo de Sueño vertical al Talós

La R-3 está ubicada bajo la gran vira diagonal, que en caso de seguir por el segundo tramo de 'Sueño vertical al Talós' deberíamos descender en diagonal a la izquierda. Vemos en el filo de la Olga Frontera a una de las cordadas con unas buenas panorámicas:


Cordada en Olga Frontera

Seguimos en ensamble con Jordi para recorrer los 60 metros que separa esta R-3 de Sueño vertical al Talós, de la R-0 de TATOcao Lo Gall, con algún paso de grimpada y caminando entre tarteras. Esta R-0 se puede montar en algún árbol.

Cojo el relevo para este primer largo con una primera mitad por una sucesión de placas (IV) hasta llegar a un paso de diedro algo desplomado (IV+) que una vez superado nos situa en un muro que va ganando verticalidad y dificultad (V/V+) y encontrando además de parabolt (unos 6/7), un clavo algo artesano y en la entrada a la R-1 una sabina con una cinta lazada, llegando a los 30 metros, y encontrando 2 parabolts con argollas. Así como en la parte inferior de la pared estábamos protegidos del viento a partir de aquí se hace sentir y hace que la sensación térmica baje considerablemente, dando la sensación de ser un día típico de invierno.






En el primer largo de TATOcao Lo Gall...
... y en su R-1...

Toma el relevo nuevamente Josep María para afrontar el segundo largo que inicia en diagonal hacia la izquierda por un tramo de placas con pasos técnicos de adherencia (V o algo más) y que conducen a un resalte vertical de canto romo donde gracias a la proximidad de los parabolts, permite poder trampear en cao de ser necesario. A pesar de estar cotado de V+, nos dio la impresión de ser algo más y llegando a un tramo más asequible en la parte final donde encontramos un puente de roca del que estaba lazado un trozo de cordino, que también renovamos convenientemente, llegando a los 30 metros a la R-2, de dos parabolts con argollas. En todo el largo unos 7 parabolts y el mencionado puente de roca. La sensación de frío en los pies se hizo más patente.



En el segundo largo de TATOcao Lo Gall...

Cambiamos de nuevo cuerdas para que Jordi rematara la faena y a pesar de lo desapacible que estaba el tiempo, consiguió pasar limpio este bonito largo, que aunque aparentemente parece el desplome el paso más difícil, en realidad lo más duro son los 4 metros anteriores al mismo (6a). Después del desplome, mucho aire bajo los pies, pero bien asegurado y con suficiente canto (V+). El inicio es la parte más tranquila (IV+), llegando a la R-3, de dos parabolts con argollas, a los 25 metros. En el largo unos 8 parabolts. Al llegar Jordi a la reunión pareció que el sol se abría paso entre las nubes.






En el tercer largo de TATOcao Lo Gall...
Panorámica del bonito espolón que recorre 'Transtalòs'

Sin demora, al reunirnos los tres en la R-3, comenzamos a preparar el descenso, primero con dos rápeles de R-3 a R-1 (55m) y de R-1 a R-0 (30m), para llegar a la feixa diagonal, que luego recorrimos hasta encontrar la Olga Frontera por la cual con un rápel de 60 metros ya se llega a la base de la pared.

Preparando el último rápel...
Panorámica de la parte superior de Olga Frontera

Llegamos al aparcamiento, donde aún encontramos a una de las cordadas que habían escalado la Olga Frontera y sin entretenernos mucho recogimos todos el material y directos hacia L'Eixida de Artesa de Segre para darnos un buen homenaje. 

Los cordinos sustituidos gracias al material de Jordi

En la sobremesa comentamos que la parte de TATOcao Lo Gall, en comparación a la anterior vez que la escalamos, nos ha parecido que otra vez volvía a tener tramos terrosos, supongo que las lluvias provocaron esta situación.

En resumen un fin de semana con diferencias considerables de temperaturas y compartido en buena compañía, que es lo más importante.