martes, 6 de marzo de 2018

La Codolosa: un buen 'último recurso'...

Seguimos con el clima 'juguetón' y toca esperar hasta el último momento como evoluciona la meteo para poder hacer planes.

Para el sábado habíamos quedado con Jordi F., siguiendo su proceso de recuperación, para escalar algo 'relajado' y cuando dio señales de vida Judit para sumarse al plan, pensamos que escalar algo en La Codolosa podría estar bien, ya que había pronóstico de fuerte viento y allí las paredes quedan bastante a resguardo.



Quedamos en el bar Muntanya de Collbató para tomar algo y acabar de cuadrar la logística y acabamos por decantarnos por escalar en el sector '29 de Febrer / Any de traspàs' y completar el día con las 'vías deportivas' que hay a su derecha, que al hacer la aproximación ya vemos que había un grupo con niñ@s escalando en las vías de la izquierda.

Empezamos con '29 de Febrer' que sólo la había escalado en una ocasión, y en el primer largo ya vi que el V°, era de los de verdad y tuve un momento de duda para ubicar donde estaba la R-1 al encontrar en una repisa anterior una doble expansión, pero después ya vi que la reunión, que tiene dos parabolts con una argolla y un trozo de cuerda que los une, estaba un poco más arriba, a unos 35 metros.



En el 1er largo de 29 de Febrer

Subieron Judit (con alguna que otra 'duda existencial') y Jordi, y al llegar Jordi se animó para escalar de primero el segundo largo. El primer resalte de este segundo largo, tiene un paso a la salida que también se podría decir de 'Vº duro', tal como constató Judit cuando le toco subir. Después una zona tumbada intermedia nos permite alcanzar el último resalte donde casi se junta con la Any de Traspàs, y Jordi le pareció más interesante este tramo (V+) y alcanzó a los 35 metros la R-2, que apenas dista un par de metros de la correspondiente a la 29 de Febrer. Al llegar tuvo que protegerse del fuerte viento que allí si tocaba.

Reseña original Any de Traspàs



En el segundo largo de 29 de Febrer
Jordi a la R-2 de Any de Traspàs


En la parte final de Any de traspàs
 Cordada en Joc de Nens
Rápido rapelamos a refugiarnos del aire...


Una vez nos reunimos los tres, con un largo rápel de casi 60 metros volvemos a la base de la pared y optamos por escalar alguna de las vías deportivas que hay a la derecha de estas vías.


Veo que desde la última visita que hice a este sector hace unos 6 años, ha habido algunas modificaciones, como que algunos espits han sido sustituidos por parabolts; hay alguna reunión intermedia añadida para evitar la salida a la parte superior que tiene roca más delicada y también alguna vía más de las que habían.

Escalamos un par de vías de Vº y una de 6a y ya nos dimos por satisfechos y acabamos dándonos un buen homenaje en Cal Anna, aprovechando para mantener una buena conversación.












En las vías deportivas...
... y foto de los tres juntos, evocando otros tiempos...

El sábado por la noche contacto con Jordi C. y Assumpció y viendo los últimos avances de la meteo que anunciaban lluvia a primera hora de la tarde, volvimos a quedar para escalar algo por Collbató (La Codolosa o Els Graus) y mientras tomábamos lis cafés el el bar Muntanya acabaríamos de concretar.

El domingo al llegar a Collbató nos recibió una pequeña lluvia que ya nos hizo pensar que la máxima actividad del día iba a ser almorzar, pero al salir parece que la cosa ha mejorado algo, pero no queriendo embarcarnos,  optamos por La Codolosa que permite una 'huída' rápida en caso de necesidad y fuimos a la Delinqüents, que descubrimos su existencia el día que escalamos 'Reincidents' con Montse y Jordi F.

Reseña 'tuneada' de 'Guillem Arias'
La pared ya estaba bastante concurrida...

Llegamos al inicio de la vía, marcado con una pequeña flecha grabada en la roca.



Como es habitual nos jugamos con Jordi con el sistema de la rama más corta para ver quien empezaba y en esta ocasión me tocó a mi.

Este primer largo inicia por placas tumbadas en diagonal a la izquierda en dirección a un parabolt bien visible en un resalte, encontrando previamente un puente de roca equipado con cordino.

El paso para superar el resalte es el más difícil de la vía (un buen V+ no obligado). Una vez superado hay que ir algo en diagonal a la derecha hacia un pequeño desplome con roca algo 'rotilla', encontrando un puente de roca equipado con cordino y un parabolt bajo dicho desplome.

Prefiero evitar lo descompuesto por la derecha y después  ya por un tramo tumbado sorteando vegetación y roca no demasiado buena, se llega a la R-1 a los casi 30 metros, de 2 parabolts con una argolla y unidos con un trozo de cuerda.



En el 1er largo

Toma el relevo Jordi y sigue con el segundo largo, con un inicio vertical, primero sorteando una gran sabina con un cordino lazado en ella, que aunque ha sido podada, incordia algo, ya que por su izquierda hay que vigilar donde se coloca el pie para no tocar alguna roca suelta. Una vez superada la sabina un poco más arriba encontramos enseguida un puente de roca equipado con cordino y seguidamente un  parabolt. Todo este tramo es vertical y sobre buena roca (IV+/V) para después ya seguir en diagonal hacia la izquierda, donde Jordi colocó en un agujero perfecto el totem calabaza donde ya hay que prestar nuevamente algo de atención a la roca, aunque la dificultad sea de IV.




Imágenes de la primera parte del segundo largo

Cuando lleva 15 metros encontró una buena reunión de dos parabolts y como en no sabíamos que por allí también está la vía Nil, montó reunión, pensando que era  nuestra R-1, cuando en realidad pertenece a la Nil.

Cuando nos reunimos los tres, vemos que hay un parabolt que marca continuación hacia la izquierda y otro hacia la derecha, lo cual ya nos hace sospechar que hemos utilizado la reunión de otra vía y que en realidad el segundo largo continua otros 15 metros. Cambiamos cuerdas y ya subo con la intención de enlazar la segunda parte del segundo largo, con el tercero.

Para llegar al parabolt de la continuación, hay una gran excursión, pero se puede aprovechar el parabot de la Nil, teniendo precaución de pasar una sola cuerda y colocar una desplegable para evitar rozamiento. Encontramos un tramo vertical donde hay que prestar atención antes de chapar el parabolt y una vez superado (IV+/V) vemos un cordino cintando un 'matojo' (de esos que no aguanta ni un estornudo), pero que marca la dirección a la que has de ir. Después ya se tumba y en diaonal a la izquierda, sorteando vegetación y algo de roca cutre, se alcanza a los 15 metros la verdadera R-2, de dos parabolts con un maillón y un cordino uniéndolos.


Sigo y ahora hay que salir de esa R-2 por su izquierda, hacia un fisura con un cordino equipado en su inicio, que deberemos ir siguiendo en dirección a un alejado parabolt, aunque pudiendo colocar piezas al gusto. Después toca una diagonal a la izquierda sorteando nuevamente bastante vegetación y más roca cutre, hasta llegar a una repisa al pie de un resalte en el que encontramos otro parabolt. Cuesta de ver, pero de ese parabolt la R-3 sólo está unos 3 metros más arriba, equipada con dos parabolts y un mosquetón, y unidos con un cordino, y a unos 30 metros de la verdadera R-2.


 En el tramo del tercer largo...
... y en la R-3 preparando el rápel...
R-3

Oímos voces que viene por debajo y viendo que al rapelar les podríamos bombardear, tomamos la opción de hacer primero un rápel corto hasta la verdadera R-2 y desde ahí otro largo hasta el suelo.


Y con dos rápeles de nuevo al suelo...

Al bajar me encuentro con la sorpresa que los compañeros que subían por detrás eran Jose Manuel N. y Pablo C., con otro amigo suyo, que ambos habían sido alumnos míos en un curso de Glacera de ya hace unos años y que después de haber escalado alguna vía en la parte central de La Codolosa, querían haber acabado el día en la Reincidents, pero que por equivocación se habían metido en la Delinqüents. Viendo que ya el 'marrón' se estaba aproximando a gran velocidad, decidieron también rapelar desde la R-1 de la Nil.

Después también nos encontramos con Pep y Susana M., que casualmente también encontramos al bajar el sábado.

Fuimos a darnos un buen homenaje a Cal Anna, y al llegar a El Bruc ya estaba lloviendo, así que mejor aprovechada la mañana, imposible. En la sobremesa hablando de la vía, coincidimos que a pesar de tener algún tramo bonito, la podríamos calificar como 'para coleccionistas' ya que los tramos de vegetación y roca cutre no animan para repetirla...

En resumen un finde condicionado por la meteo, y que tal como había ido, aún podemos estar contentos por poder haber escalado algo, aunque como siempre, lo más interesante ha sido poder compartir buenos momentos con buen@s amig@s...












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