Después de volver del Pallars había acordado con Josep María, con el que compartimos el año pasado aventuras en 'Ansó', de escalar algo utilizando el refugio de 'Casa de Piedra' como campo base.
A medida que pasaban los días la meteo iba cambiando y ya no sabías que pensar, pero eso ya es habitual a finales de agosto.
Efectuamos el viaje y al mediodía ya nos estábamos instalando. El refugio no estaba muy concurrido y alguno de los días tuvimos una de las habitaciones para nosotros solos. Picamos algo y como el pronóstico para el día siguiente no era nada bueno, quisimos aprovechar la tarde.
Aunque ya la había escalado, optamos por comenzar por la vía que posiblemente más se ha repetido desde su apertura: 'Via del Nano', de la cual tenía el recuerdo que cuando la escalé con Ani y Bernat me costó bastante, al estar algo mojada la entrada.
Por ese motivo preferí comenzar la escalada y esta vez sin problemas conseguí superar el tramo inicial (V°) y enlazar, saltándome la reunión intermedia, que es para los que la utilizan como largo de deportiva, y llegar a los 40 metros a la R-1, encontrando en el recorrido 8 parabolts y la reunión mencionada.
En el primer largo del Nano...
... y R-1...
Subió Josep María y siguió con el segundo largo, que también cuenta con un primer resalte atlético (V-), para después seguir en diagonal a la derecha para resolver un último resalte vertical (IV+/V) que ya permite alcanzar la R-2 a los 30 metros, encontrando 10 parabolts en su recorrido.
En el segundo largo del Nano
Recupero el largo y escalo el tercer largo que va superando una sucesión de placas con algún pequeño resalte (IV+/V), llegando a los 30 metros a la R-3 y encontrando en el recorrido 5 parabolts.
Una vez en la cima del Primer Muro, optamos por bajar caminando y al llegar a la base de la pared nos encontramos con un grupo de escaladores guipuzcoanos que estaban escalando las vías deportivas que hay a la izquierda de la Super Nano. Vemos que hay una línea más nueva a la derecha de la vía que acabamos de escalar, con una cinta que delata su nombre:
De estas vía aún no habíamos visto ninguna reseña, ya que ha sido abierta este verano, con lo que nos metimos sin saber ni lo que era, ni por donde iba, y claro, así pasan las cosas después...
Desde el suelo se ve un pronunciado desplome a la misma altura que el del primer largo del Nano. Me meto y con unos movimientos algo explosivos (V+), pero con relativo buen canto, supero este resalte para luego ya seguir por placas tumbadas (IV/III) hasta la R-1 a los 35 metros al pie de una buena fisura.
Sigue Josep María con el segundo largo con un inicio explosivo que parece tan duro como el del primer largo, aunque luego vimos que en la reseña se ha cotado de Vº
Y como no habíamos visto aún la reseña, Josep Maria, siguiendo la lógica montó la R-2 en la que correspondía a la Super Nano, no percatándose que en los últimos metros debía de haber marchado hacia la derecha, donde hay un parabolt no demasiado visible.
Como tampoco habíamos escalado Super Nano, escalamos su tercer largo convencidos a que debía pertenecer a Tercera Vía. Este tercer largo siguiendo la tónica de las contiguas vías supera algún resalte de IV+/V y sin más problemas llegamos nuevamente a la cima del Primer Espolón y volvimos a efectuar el descenso caminando.
En el refugio al mirar el libro de reseñas vimos que ya estaba la de la Tercera Vía y entendimos el error cometido. Cenando coincidimos con una cordada de tres compañeros murcianos con los que intercambiamos informaciones y buena conversación.
Al día siguiente con la previsión tan nefasta anunciada, no nos atrevimos ir demasiado lejos y optamos por escalar primero una vía del Segundo Espolón a la derecha del Espolón Rebollo, que ya habíamos escalado con Ani y Bernat, y que teniendo un paso más difícil que esta, en general es menos obligada: Boletus.
Para acceder al Segundo Espolón se realiza desde el final del Primer Espolón, al que se puede llegar escalando o bien caminando, que fue la opción que tomamos al no tener claro que la meteo nos permitiese escalar más de una vía y por eso preferimos por optar por una vía que no conociésemos ninguno de los dos.
Al llegar al pie de vía incluso ya pareció caer alguna pota de agua y aún con dudas acabé iniciando la escalada con un primer largo que inicia superando una serie de placas de IV+ que permiten alcanzar un resalte algo desplomado que es donde está concentrada la dificultad. El tramo me pareció más duro que el 6a apuntado, aunque el condicionante de la presión de si llovía o no, puede que nos hiciera verlo más difícil de lo que es, y desde luego que aún haciendo un par de Ao, creo que obligado puede ser V/V+. Una vez superado este tramo se continua por una sucesión de placas de IV que conducen a un jardín donde se encuentra la R-1 a los 35 metros. Mientras recupera el largo Josep María oímos a nuestra izquierda que lo compañeros murcianos estaban escalando Espolón Rebollón, después de haber escalado Super Nano del Primer Espolón.
Sigue Josep María con el segundo largo comenzando en diagonal a la izquierda y siguiendo un sistema de placas (IV+) para luego seguir por terreno más fácil (IV/III) hasta la cima de una aguja, a la que se llega a los 35 metros. Mientras escalamos este largo podemos sacar fotografías de los vecinos del Espolón Rebollón.
El tercer largo empieza con un pequeño destrepe de la cima de la aguja, para llegar a la base de una arista que seguiremos (IV+) hasta ya alcanzar un tramo tumbado sorteando árboles que a los 30 metros permiten alcanza la R-3 en un gran árbol con trozo de cable rodeándolo a los 30 metros. Sube Josep María y parece que la meteo aún aguanta, así que bajamos para escalar Super Nano, pero saliendo por el tercer largo de Tercera Vía, que nos quedó pendiente el día anterior.
Afronta Josep María el segundo largo de Super Nano con una entrada que dicen de 6b y que con un par de pasos de artifo, se puede solventar, si no se quiere complicar la vida, después en ligera diagonal a la derecha superando placas de V- se alcanza la R-2 a los 20 metros, que es la que ya utilizamos el día antes pensando que correspondía a la Tercera Vía. Al recuperar este segundo largo y prepararme para afrontar el tercer largo de Tercera Vía se empieza a animar a llover y después de unas dudas, optamos por preparar el rápel. Plegamos cuerdas,las lanzamos y cuando iba a empezar a rapelar, para de llover y replanteamos la situación. Recuperamos nuevamente las cuerdas y efectuó el cambio de reunión para alcanzar la R-2 de Tercera Vía, que está a la derecha y un par de metros por debajo y al pie de una canal negra que da un aspecto algo lúgubre para su escalada.
Al ser una vía muy reciente, tomamos muchas precauciones con la roca, y más al ver que está graduado de V+, pero por sorpresa se trata de una placa algo desplomada, en la que van apareciendo los cantos precisos en el momento necesario, resultando una interesante escalada. Como veo que la R-3 está a penas a 25 metros, enlazo y sigo con el cuarto largo que con 25 metros más de III/IV permite llegar a la cima del primer Espolón y montar reunión de un árbol con un cable que lo rodea, como la encontrada en la Boletus.
Como pensamos que ya habíamos tentado bastante la suerte, dimos por acabada la escalada y al bajar al refugio cayó después algo de agua, pero sin llegar a cumplirse los nefastos pronósticos anunciados.
Para el día siguiente que ya teníamos una previsión buena, optamos por escalar en la pared del Muro de la Cascada de Bachimaña, una que ya se ha convertido en una de sus clásicas:
El séptimo largo nuevamente comienza con un pequeño resalte vertical (IV+) seguido por un muro más tumbado pero muy compacto en el que hay que ir jugando para encontrar el 'buen camino', llegando a la R-7 a los 20 metros.
El octavo largo inicia con un muro vertical con poco canto (Vº) en el que hay que seguir sinuosamente, encontrando el buen recorrido y una vez superado ya sigue por placa (IV+) hasta llegar a los 20 metros a la R-8.
Mirando la reseña, vemos que lo que queda se puede ir enlazando sin problemas y empalmo el noveno y décimo largo y un tramo de bosque intermedio, colocando cintas largas, y ya monto la reunión bajo la cabeza somital (IIIº) a la que llego en unos 55 metros.
Desde la cima unas 'fitas' marcan el recorrido, en ligero descenso, que nos permite enlazar con el camino que hacia la izquierda nos conducirá, prácticamente en plano, hasta los Llanos de Bozuelo y de ahí remontando desde el pie de la Arista Mogli, en poco tiempo ya alcanzamos el pie de vía de la Baloo.
Llegamos a pie de vía y aparentemente persiste la buena meteo. Esta vez será Josep María quien escalará los largos impares y yo los pares. El primer largo es un precioso espolón con un tramo inicial de IV, una sección central más técnica de V, que en algún punto, según como se suba, casi roza el V+, y finalizando con un tramo más amable, de IV+ que permite alcanzar la R-1 a los 35 metros junto a un pequeño árbol.
El segundo largo que sobre reseña parece muy tranquilo y después no lo es tanto. Inicia en travesía horizontal a la izquierda (IIº), algo descendente al final, para llegar a una chimenea-lastra que al estar a la sombra hace que tengamos que batallar con musgo húmedo que hace apretar más de lo esperado. Se asciende en chimenea, con posibilidad de salir antes del último parabolt, a la izquierda, o continuarla para luego atravesar hacia la izquierda hasta la R-2 a los 20 metros.
El tercer largo empieza por un resalte de placa vertical de pequeños agarres pero que con la fabulosa adherencia de la roca permite progresar tranquilamente (V-/V). Después se va tumbando y después de llegar a un árbol, ya hay que ir en diagonal a la derechas hasta llegar a la R-3 a los 25 metros
El cuarto largo sigue en marcada diagonal a la derecha , fácil al principio (III) hasta ya llegar bajo unos cortos resaltes que iremos superando sin mayor problema (IV+), hasta llegar a la R-4 a los 20 metros. Este largo es fácil de poder unir con el siguiente, pero en nuestro caso no lo hicimos.
El quinto largo es de parecidas características al anterior, empezando con un tramo fácil de IIIº que poco a poco se va poniendo algo más difícil (IV+), hasta llegar a un pequeño resalte de V-, que ya una ve superado permiten salir de la pared y montar la R-5 en un gran árbol a los 25 metros.
Viendo los negros nubarrones empezamos a plegar cuerdas y recoger material, y al poco rato de acabar, ya empieza a llover con cierta persistencia, a pesar de no son ni las 4 de la tarde, dos horas antes de lo anunciado. Al no ser tormenta eléctrica, cruzamos hacia la derecha el bosque y nos guarecemos bajo unos árboles, que en principio evitaban mojarnos, pero a medida que la lluvia fue a más acabamos bien mojados. Después de 45 minutos bajo la lluvia y consultando las imágenes de los satélites de la meteo, ya vimos que no tenía pinta de parar, así que resignados empezamos con mucha precaución el descenso, hasta que al cabo de unos 10 minutos de haber empezado el descenso, para nuestra sorpresa vemos que cesa la lluvia y ya pudimos efectuar todo el descenso sin lluvia, aunque eso si, ya íbamos mojados.
Nos encontramos con algún senderista que les había pillado bajando del Refugio de Bachimaña y en el tramo que han colocado cables al pasar sobre el río, agradecimos que estuvieran colocados, ya que aquí un patinazo puede tener muy malas consecuencias.
Llegamos a la Casa de Piedra y después de poder cambiar de ropa, volvió a descargar una nueva tormenta. Después de cenar evaluamos la situación y viendo que teníamos todo el material y cuerdas mojados y que de hecho habíamos previsto solo hacer alguna corta escalada, antes de regresar hacia casa, optamos ya por dar por terminada la breve pero productiva estancia en el Balneario de Panticosa. Los dos quedamos contentos con la actividad y no descartando una nueva visita.
Para el último día de vacaciones quedamos con Jordi F. para escalar en el Turó de Cal Beco, dado que las previsiones no apuntaban a ser demasiado halagüeñas. Habíamos oído que se había abierto un sub sector con vías 'fáciles', pero no sabíamos ni su exacta ubicación ni la dificultad de la misma.
Subimos hasta el sector 'Pasovich' y empezamos a desplazarnos hacia la derecha hasta encontrar el sector que buscábamos y que después por la red supimos que se le denomina:
Curiosamente este sector ha sido equipado por un viejo conocido con el que coincidimos el año pasado en 'L'escut': Esteve M..
Escalamos de derecha a izquierda todas las vías, empezando por CADE 75 A. (IV+ con un paso puntual de V), de unos 20 metros.
Seguimos con Can Cortines (también con un paso puntual de V) de unos 20 metros,
Hay que advertir que entre estas dos vías, hay escondido entre la vegetación un panal de abejas que Jordi ya tuvo la ocasión de ver como le picaban, aunque por fortuna, sólo una de ellas.
Seguimos con una vía que debe ser nueva, ya que no dispone aún ni de nombre, y que es de unos 10 metros, con el tramo final coincidente con Figuerola de Meià, y con la segunda parte de la vía con los seguros más distantes que la primera.
Después ya escalamos Figuerola de Meià,con una entrada aparentemente más difícil que la anterior (paso puntual de V) y el resto de parecidas características y de unos 10 metros.
La siguiente vía, que de momento, ya es la última del sector: Cicle Fiba-Colin 77 es de unos 20 metros y con una dificultad de III+ y después de un tramo casi caminando tiene un último resalte de IVº.
Una vez escaladas las vías de este sub sector, nos trasladamos al sector de L'escut,empezando por la vía de más a la derecha de la vía del Carles, que de unos 20 metros nos pareció ser una vía de 6a con un posible paso puntual de ¿6a+?. A la izquierda de la del Carles parece haber otra vía más.
Seguimos con Calvin & Hobbes, que en algunas reseñas aparece de V+ y en la guía de Luichy de 6a, que es lo que nos pareció más ajustado, con unos 20 metros y que describe al inicio una gran diagonal a la derecha hasta llegar a la atlética fisura:
Y para acabar la matinal escalamos un bonito y atlético 6a+, equipada con químicos: The Walking Drunks.
Con esto ya dimos por acabada una buena matinal que nos ha permitido conocer un nuevo sector y que después nos ha permitido apretar algo más. Ahora toca volver a la rutina después de dos buenas semanas de actividad.
En el tercer largo del Nano
Desde el suelo se ve un pronunciado desplome a la misma altura que el del primer largo del Nano. Me meto y con unos movimientos algo explosivos (V+), pero con relativo buen canto, supero este resalte para luego ya seguir por placas tumbadas (IV/III) hasta la R-1 a los 35 metros al pie de una buena fisura.
En el primer largo de Tercera Vía
R-1 Tercera Vía
Sigue Josep María con el segundo largo con un inicio explosivo que parece tan duro como el del primer largo, aunque luego vimos que en la reseña se ha cotado de Vº
En el segundo largo de la Tercera Vía
Y como no habíamos visto aún la reseña, Josep Maria, siguiendo la lógica montó la R-2 en la que correspondía a la Super Nano, no percatándose que en los últimos metros debía de haber marchado hacia la derecha, donde hay un parabolt no demasiado visible.
Como tampoco habíamos escalado Super Nano, escalamos su tercer largo convencidos a que debía pertenecer a Tercera Vía. Este tercer largo siguiendo la tónica de las contiguas vías supera algún resalte de IV+/V y sin más problemas llegamos nuevamente a la cima del Primer Espolón y volvimos a efectuar el descenso caminando.
En el refugio al mirar el libro de reseñas vimos que ya estaba la de la Tercera Vía y entendimos el error cometido. Cenando coincidimos con una cordada de tres compañeros murcianos con los que intercambiamos informaciones y buena conversación.
'Tercera Vía'
Mapa de ubicación de las principales vías de Sendero Límite
Al día siguiente con la previsión tan nefasta anunciada, no nos atrevimos ir demasiado lejos y optamos por escalar primero una vía del Segundo Espolón a la derecha del Espolón Rebollo, que ya habíamos escalado con Ani y Bernat, y que teniendo un paso más difícil que esta, en general es menos obligada: Boletus.
'Espolón del Rebollón y Boletus'
Al llegar al pie de vía incluso ya pareció caer alguna pota de agua y aún con dudas acabé iniciando la escalada con un primer largo que inicia superando una serie de placas de IV+ que permiten alcanzar un resalte algo desplomado que es donde está concentrada la dificultad. El tramo me pareció más duro que el 6a apuntado, aunque el condicionante de la presión de si llovía o no, puede que nos hiciera verlo más difícil de lo que es, y desde luego que aún haciendo un par de Ao, creo que obligado puede ser V/V+. Una vez superado este tramo se continua por una sucesión de placas de IV que conducen a un jardín donde se encuentra la R-1 a los 35 metros. Mientras recupera el largo Josep María oímos a nuestra izquierda que lo compañeros murcianos estaban escalando Espolón Rebollón, después de haber escalado Super Nano del Primer Espolón.
Aproximación sin posibilidad de pérdida...
Pie de vía Boletus
Primer largo de Boletus
Sigue Josep María con el segundo largo comenzando en diagonal a la izquierda y siguiendo un sistema de placas (IV+) para luego seguir por terreno más fácil (IV/III) hasta la cima de una aguja, a la que se llega a los 35 metros. Mientras escalamos este largo podemos sacar fotografías de los vecinos del Espolón Rebollón.
En el segundo largo de Boletus
Los vecinos en el Espolón Rebollón
El tercer largo empieza con un pequeño destrepe de la cima de la aguja, para llegar a la base de una arista que seguiremos (IV+) hasta ya alcanzar un tramo tumbado sorteando árboles que a los 30 metros permiten alcanza la R-3 en un gran árbol con trozo de cable rodeándolo a los 30 metros. Sube Josep María y parece que la meteo aún aguanta, así que bajamos para escalar Super Nano, pero saliendo por el tercer largo de Tercera Vía, que nos quedó pendiente el día anterior.
En el tercer largo de Boletus
R-3 de Boletus
Panorámica desde el final de la vía
Aunque no lo parece, estaba en el camino...
La señalización de los GR...
Panorámica del Segundo Espolón
Llegamos a la base del Primer Espolón y aunque el tiempo persistía algo inestable, decidimos mantener el plan y comienzo a escalar el primer largo de Super Nano, superando en diagonal a la derecha un buen desplome de V+, tras el cual, y ahora en ligera diagonal a la izquierda se van escalando unos resaltes de placa (V) que nos llevan a la reunión intermedia que también nos saltamos el día anterior al escalar la Nano y ahora cruzándose a su derecha y llegando a la R-1 a los 40 metros y emplazada a unos 3 metros a la derecha de la R-1 del Nano.
En el primer largo de Super Nano
Afronta Josep María el segundo largo de Super Nano con una entrada que dicen de 6b y que con un par de pasos de artifo, se puede solventar, si no se quiere complicar la vida, después en ligera diagonal a la derecha superando placas de V- se alcanza la R-2 a los 20 metros, que es la que ya utilizamos el día antes pensando que correspondía a la Tercera Vía. Al recuperar este segundo largo y prepararme para afrontar el tercer largo de Tercera Vía se empieza a animar a llover y después de unas dudas, optamos por preparar el rápel. Plegamos cuerdas,las lanzamos y cuando iba a empezar a rapelar, para de llover y replanteamos la situación. Recuperamos nuevamente las cuerdas y efectuó el cambio de reunión para alcanzar la R-2 de Tercera Vía, que está a la derecha y un par de metros por debajo y al pie de una canal negra que da un aspecto algo lúgubre para su escalada.
En el segundo largo de Super Nano
Al ser una vía muy reciente, tomamos muchas precauciones con la roca, y más al ver que está graduado de V+, pero por sorpresa se trata de una placa algo desplomada, en la que van apareciendo los cantos precisos en el momento necesario, resultando una interesante escalada. Como veo que la R-3 está a penas a 25 metros, enlazo y sigo con el cuarto largo que con 25 metros más de III/IV permite llegar a la cima del primer Espolón y montar reunión de un árbol con un cable que lo rodea, como la encontrada en la Boletus.
Y finalizando la Tercera Vía
Para el día siguiente que ya teníamos una previsión buena, optamos por escalar en la pared del Muro de la Cascada de Bachimaña, una que ya se ha convertido en una de sus clásicas:
Croquis general de la pared
Después de un buen almuerzo emprendimos la algo larga aproximación, sin prisa, pero sin pausa, fuimos ganando altura hasta llegar a la subida del Fraile, que es donde hay que abandonar el GR para desviarse hacia la derecha hasta la base de la pared. Aunque en la reseña indica 1h 20', si se va tranquilo, contar 1h 45'. En la aproximación vimos una cordada de Guardias Civiles que debieron ir a alguna de las vías de más a la derecha
En la aproximación...
... hasta ya ver nuestro objetivo...
Una marmota nos vino a ver...
Estuvimos algo desconcertados al no ver ningún disco de plástico naranja en el inicio de la vía, tal como se describe en muchas referencias por la red. Después por la tarde pudimos hablar con uno de los autores de Sendero Límite y nos explicó que al parecer les habían recriminado por utilizar este tipo de señalización que ya habían utilizado para otras vías y que actualmente se han retirado casi todas.
Como no veía el mencionado disco, me pasé de largo y descubrí la existencia de una nueva vía a la derecha del Espolón del Pino: Climbers girls. Entonces volví a la izquierda y ya vi el segundo parabolt de la vía buscada, así que descendí y ya encontré el primer parabolt con la típica cinta con el nombre de la vía grabado. Avisé a Josep María y ya nos reunimos para poder comenzar la vía. Cuando nos estamos equipando, primero pasó una cordada que creo se metieron en la vía del Diedro y después dos cordadas del Ejército que creo se metieron en El Dorado.
Esta vez quedamos que para Josep María los largos impares y para mi los pares. El primer largo con un resalte con mucho canto (III+) para alcanzar un visible primer parabolt, encontrando un metro antes un puente de roca equipado con un cordino. Se sigue por una cresta, con otro par de parabolts, hasta encontrar una placa vertical protegida con otros dos parabolts (III/IV) que ya nos permiten alcanzar una amplia repisa donde encontraremos a los 40 metros la R-1 de dos parabolts.
El segundo largo comienza por la izquierda de la R-1, con una escalada fácil (III/IV) que progresivamente se va poniendo vertical hasta llegar a un resalte donde ya hay que esforzarse (IV+/V), muy bien asegurado, que permite llegar a los 35 metros a la R-2 de dos parabolts, habiendo encontrado 10 parabolts en el recorrido.
El tercer largo enlaza dos compactas placas donde hay que jugar con la gran adherencia (V-/V), hasta salir a una placa tumbada que conduce al gran pino que da nombre a la vía y donde montaremos la R-3 a los 35 metros. En el recorrido 6 parabolts.
El cuarto largo sigue un espolón con algún pequeño resalte (IV) que permite alcanzar a los 30 metros bajo un desplome que nos deja a cubierto del sol en una buena sombra. En el recorrido encontramos 6 parabolts.
El quinto largo empieza superando un resalte vertical (IV/IV+) para acceder a una zona de repisas herbosas. Aquí en lugar de seguir ascendiendo por hierba por la derecha, hay que ir por un espolón tumbado a la izquierda, que aunque al final del mismo al parecer debe haber una reunión algo escondida, lo mejor es seguir por una nueva repisa herbosa algo hacia la izquierda y llegar a los 55/60 metros a la teórica R-5 bis, de un sólo parabolt, habiendo encontrado 4 parabolts en el recorrido.
El sexto largo empieza con un muro algo desplomado, de unos 5 metros (V/V+), con canto, pero muy atlético, para salir a una placa tumbada de adherencia (IV+/V), que permite alcanzar a los 25 metros la R-6 de dos parabolts. En el recorrido encontraremos 6 parabolts.
El séptimo largo empieza con un paso en diagonal a la derecha algo 'raro', para después seguir con tramos de placa intercalados con un par de resaltes para llegar a una placa tumbada que conduce al final de las dificultades de la pared, encontrando la R-7 a los 35 metros con dos parabolts en el suelo.
Recogemos cuerdas y material y recorremos el escaso desnivel que nos separa hasta el refugio de Bachimaña donde permanecimos unos instantes antes de emprender el descenso.
Mientras estábamos tomando algo en la Casa de Piedra, una de sus trabajadoras nos sugirió una via para el día siguiente, que podríamos combinar con otra, así que ya teníamos el plan para el día siguiente:
'Molondro'
El pronóstico, en principio, era bueno hasta media tarde, lo que nos daba cierto margen para poder realizar las escaladas previstas. Iniciamos el acceso rápido que inicia como el día anterior por el GR, pero que una vez pasado el Mirador de la Reina, hay que seguir por la derecha y al cruzar el río Caldarés, al otro lado del puente y entre medio de árboles ya se ven los parabolts del primer largo. Contar unos 15 minutos.
Esta vez nos repartimos los largos de manera que para mi los impares y para Josep María los pares. El primer largo empieza con un pequeño desplome atlético, para calentar de golpe (V° uf!), siguiendo después por una especie de espolón vertical (V-) y ya después siguiendo por placas se alcanza una reunión que es mejor saltarse y continuar en diagonal a la derecha (III°/II°). Hay que fijarse para poder localizar la R-1 que hay un arbolito con una cinta muy visible, desde el cual flanqueando en horizontal a la derecha unos 3 metros ya se alcanza la R-1 a los 40 metros .
El segundo largo recorre una sucesión de placas tumbada (IIº) con algún pequeño resalte de IIIº, llegando a los 20 metros a la R-2.
El tercer largo comienza algo hacia la derecha por placa tumbada y después de superar un pequeño resalte se alcanza una placa fisurada (IV/IV+), siguiendo ya por un muro tumbado (IV) que permite alcanzar la R-3 a los 20 metros. Si se colocan cintas largas se pueden unir este largo con el anterior.
El cuarto largo supera algún resalte para luego 'jugar' entre bloques para poder alcanzar la R-4 a los 30 metros (IIIº).
El quinto largo supera una gran placa con pasos de adherencia a controlar (V-/V), que se van tumbando a medida que ascendemos, para ya alcanzar la R-5 a los 30 metros.
El sexto largo empieza con un resalte vertical fisurado que una vez superado va siguiendo por placa (IV+) hasta alcanzar a los 25 metros la R-6.
Inicio vía
Esta vez quedamos que para Josep María los largos impares y para mi los pares. El primer largo con un resalte con mucho canto (III+) para alcanzar un visible primer parabolt, encontrando un metro antes un puente de roca equipado con un cordino. Se sigue por una cresta, con otro par de parabolts, hasta encontrar una placa vertical protegida con otros dos parabolts (III/IV) que ya nos permiten alcanzar una amplia repisa donde encontraremos a los 40 metros la R-1 de dos parabolts.
En el primer largo
El segundo largo comienza por la izquierda de la R-1, con una escalada fácil (III/IV) que progresivamente se va poniendo vertical hasta llegar a un resalte donde ya hay que esforzarse (IV+/V), muy bien asegurado, que permite llegar a los 35 metros a la R-2 de dos parabolts, habiendo encontrado 10 parabolts en el recorrido.
En el segundo largo
Y en la R-2
El tercer largo enlaza dos compactas placas donde hay que jugar con la gran adherencia (V-/V), hasta salir a una placa tumbada que conduce al gran pino que da nombre a la vía y donde montaremos la R-3 a los 35 metros. En el recorrido 6 parabolts.
En el tercer largo
El cuarto largo sigue un espolón con algún pequeño resalte (IV) que permite alcanzar a los 30 metros bajo un desplome que nos deja a cubierto del sol en una buena sombra. En el recorrido encontramos 6 parabolts.
En el cuarto largo
El quinto largo empieza superando un resalte vertical (IV/IV+) para acceder a una zona de repisas herbosas. Aquí en lugar de seguir ascendiendo por hierba por la derecha, hay que ir por un espolón tumbado a la izquierda, que aunque al final del mismo al parecer debe haber una reunión algo escondida, lo mejor es seguir por una nueva repisa herbosa algo hacia la izquierda y llegar a los 55/60 metros a la teórica R-5 bis, de un sólo parabolt, habiendo encontrado 4 parabolts en el recorrido.
En el quinto largo...
...y asegurando desde R-4...
El sexto largo empieza con un muro algo desplomado, de unos 5 metros (V/V+), con canto, pero muy atlético, para salir a una placa tumbada de adherencia (IV+/V), que permite alcanzar a los 25 metros la R-6 de dos parabolts. En el recorrido encontraremos 6 parabolts.
En el sexto largo
El séptimo largo empieza con un paso en diagonal a la derecha algo 'raro', para después seguir con tramos de placa intercalados con un par de resaltes para llegar a una placa tumbada que conduce al final de las dificultades de la pared, encontrando la R-7 a los 35 metros con dos parabolts en el suelo.
En el séptimo largo
Recogemos cuerdas y material y recorremos el escaso desnivel que nos separa hasta el refugio de Bachimaña donde permanecimos unos instantes antes de emprender el descenso.
Saliendo de la R-7
Foto cima
En el refu...
E iniciamos el descenso...
..volviendo a ver la pared escalada...
En el descenso...
Mientras estábamos tomando algo en la Casa de Piedra, una de sus trabajadoras nos sugirió una via para el día siguiente, que podríamos combinar con otra, así que ya teníamos el plan para el día siguiente:
'Baloo'
El pronóstico, en principio, era bueno hasta media tarde, lo que nos daba cierto margen para poder realizar las escaladas previstas. Iniciamos el acceso rápido que inicia como el día anterior por el GR, pero que una vez pasado el Mirador de la Reina, hay que seguir por la derecha y al cruzar el río Caldarés, al otro lado del puente y entre medio de árboles ya se ven los parabolts del primer largo. Contar unos 15 minutos.
Mirador de la Reina
Recorrido aproximado de la vía
... y sólo cruzar el puente ya estamos...
...a pie de vía...
Esta vez nos repartimos los largos de manera que para mi los impares y para Josep María los pares. El primer largo empieza con un pequeño desplome atlético, para calentar de golpe (V° uf!), siguiendo después por una especie de espolón vertical (V-) y ya después siguiendo por placas se alcanza una reunión que es mejor saltarse y continuar en diagonal a la derecha (III°/II°). Hay que fijarse para poder localizar la R-1 que hay un arbolito con una cinta muy visible, desde el cual flanqueando en horizontal a la derecha unos 3 metros ya se alcanza la R-1 a los 40 metros .
En el primer largo...
.. y R-1...
El segundo largo recorre una sucesión de placas tumbada (IIº) con algún pequeño resalte de IIIº, llegando a los 20 metros a la R-2.
En el segundo largo
El tercer largo comienza algo hacia la derecha por placa tumbada y después de superar un pequeño resalte se alcanza una placa fisurada (IV/IV+), siguiendo ya por un muro tumbado (IV) que permite alcanzar la R-3 a los 20 metros. Si se colocan cintas largas se pueden unir este largo con el anterior.
En el tercer largo
El cuarto largo supera algún resalte para luego 'jugar' entre bloques para poder alcanzar la R-4 a los 30 metros (IIIº).
En el cuarto largo
El quinto largo supera una gran placa con pasos de adherencia a controlar (V-/V), que se van tumbando a medida que ascendemos, para ya alcanzar la R-5 a los 30 metros.
En el quinto largo
En el sexto largo
En el séptimo largo
El octavo largo inicia con un muro vertical con poco canto (Vº) en el que hay que seguir sinuosamente, encontrando el buen recorrido y una vez superado ya sigue por placa (IV+) hasta llegar a los 20 metros a la R-8.
En el octavo largo
Uniendo noveno y décimo largos
Ya sólo nos quedó remontar caminado un breve resalte para ya alcanzar la cima y calcular nuestra ubicación para ver como enlazar hasta nuestra próxima vía. Aprovechamos para ver la popular Pared de la Tubería, que queda pendiente para una próxima visita
Por encima nuestros la popular Pared de la Tubería
Foto cima
Desde la cima unas 'fitas' marcan el recorrido, en ligero descenso, que nos permite enlazar con el camino que hacia la izquierda nos conducirá, prácticamente en plano, hasta los Llanos de Bozuelo y de ahí remontando desde el pie de la Arista Mogli, en poco tiempo ya alcanzamos el pie de vía de la Baloo.
Tristemente vemos que a esta altitud también ha llegado la procesionaria...
Pared de Bozuelo
Nos cruzamos con varias familias en el camino hacia Bozuelo
Panorámica del recorrido aproximado de la vía
Pie de vía
Llegamos a pie de vía y aparentemente persiste la buena meteo. Esta vez será Josep María quien escalará los largos impares y yo los pares. El primer largo es un precioso espolón con un tramo inicial de IV, una sección central más técnica de V, que en algún punto, según como se suba, casi roza el V+, y finalizando con un tramo más amable, de IV+ que permite alcanzar la R-1 a los 35 metros junto a un pequeño árbol.
En el primer largo de Baloo
El segundo largo que sobre reseña parece muy tranquilo y después no lo es tanto. Inicia en travesía horizontal a la izquierda (IIº), algo descendente al final, para llegar a una chimenea-lastra que al estar a la sombra hace que tengamos que batallar con musgo húmedo que hace apretar más de lo esperado. Se asciende en chimenea, con posibilidad de salir antes del último parabolt, a la izquierda, o continuarla para luego atravesar hacia la izquierda hasta la R-2 a los 20 metros.
En el segundo bonito largo
El tercer largo empieza por un resalte de placa vertical de pequeños agarres pero que con la fabulosa adherencia de la roca permite progresar tranquilamente (V-/V). Después se va tumbando y después de llegar a un árbol, ya hay que ir en diagonal a la derechas hasta llegar a la R-3 a los 25 metros
En el tercer largo de Baloo
.El cuarto largo sigue en marcada diagonal a la derecha , fácil al principio (III) hasta ya llegar bajo unos cortos resaltes que iremos superando sin mayor problema (IV+), hasta llegar a la R-4 a los 20 metros. Este largo es fácil de poder unir con el siguiente, pero en nuestro caso no lo hicimos.
En el cuarto largo...
... y por detrás de la Pared de la Tubería empezaban a asomar negras nubes...
El quinto largo es de parecidas características al anterior, empezando con un tramo fácil de IIIº que poco a poco se va poniendo algo más difícil (IV+), hasta llegar a un pequeño resalte de V-, que ya una ve superado permiten salir de la pared y montar la R-5 en un gran árbol a los 25 metros.
En el quinto largo
Tal como llego a la R-5 sigo hacia la derecha hacia donde termina la Arista Mogli y donde en un árbol hay un 'buzón' con la libreta de 'piadas', a unos 10 metros.
El 'buzón' de la Arista Mogli
Nos encontramos con algún senderista que les había pillado bajando del Refugio de Bachimaña y en el tramo que han colocado cables al pasar sobre el río, agradecimos que estuvieran colocados, ya que aquí un patinazo puede tener muy malas consecuencias.
Llegamos a la Casa de Piedra y después de poder cambiar de ropa, volvió a descargar una nueva tormenta. Después de cenar evaluamos la situación y viendo que teníamos todo el material y cuerdas mojados y que de hecho habíamos previsto solo hacer alguna corta escalada, antes de regresar hacia casa, optamos ya por dar por terminada la breve pero productiva estancia en el Balneario de Panticosa. Los dos quedamos contentos con la actividad y no descartando una nueva visita.
Para el último día de vacaciones quedamos con Jordi F. para escalar en el Turó de Cal Beco, dado que las previsiones no apuntaban a ser demasiado halagüeñas. Habíamos oído que se había abierto un sub sector con vías 'fáciles', pero no sabíamos ni su exacta ubicación ni la dificultad de la misma.
Subimos hasta el sector 'Pasovich' y empezamos a desplazarnos hacia la derecha hasta encontrar el sector que buscábamos y que después por la red supimos que se le denomina:
'Can Cortines' (tuneada y con otra vía añadida)
Curiosamente este sector ha sido equipado por un viejo conocido con el que coincidimos el año pasado en 'L'escut': Esteve M..
Escalamos de derecha a izquierda todas las vías, empezando por CADE 75 A. (IV+ con un paso puntual de V), de unos 20 metros.
Seguimos con una vía que debe ser nueva, ya que no dispone aún ni de nombre, y que es de unos 10 metros, con el tramo final coincidente con Figuerola de Meià, y con la segunda parte de la vía con los seguros más distantes que la primera.
Después ya escalamos Figuerola de Meià,con una entrada aparentemente más difícil que la anterior (paso puntual de V) y el resto de parecidas características y de unos 10 metros.
Reseña de Fernando M. tuneada
Y para acabar la matinal escalamos un bonito y atlético 6a+, equipada con químicos: The Walking Drunks.
2 comentarios:
Renoi Xavi, quanta activitat a Panticosa, llàstima de temps inestable, aprofito per agafar idees, Bones Vacances !
Entorn al Balneari de Panticosa hi han numeroses posibilitats per poguer combinar vies amb roca i equipament molt bo...
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