
El día fue bastante caluroso, pero disfrutamos de un espléndido día de escalada, con algún punto de “desesperación” al llevar delante una cordada de 3 que nos hicieron subir a un ritmo más pausado de lo deseable. En la foto Santi, Jordi y Xavi en la tercera reunión.
Santi hizo cordada con su hijo y se repartieron la vía a medias para tirar de primero. Ni que decir que al “papá” se le caía la baba.
En resumen un día apacible en este rincón de la Noguera.