Hace unas semanas, cuando cayó en mis manos el boletín mensual de la 'A.E.C.' me quedé reflexionando sobre el editorial publicado:
Me hizo rememorar mis inicios en el club en que mirábamos en cierta manera a los veteranos como unos referentes para nosotros, pero por otra parte tal como se mencionada en este editorial, costaba asumir que esas personas también habían sido jóvenes y que con mucho peor material y con unas condiciones de vida muchísimo más duras que las nuestras, habían realizado grandes actividades tanto en grandes paredes, como haciendo por ejemplo la primera integral en esquís de los Pirineos en 1966 en 37 días de actividad,..
Recuerdo como comentaban que una actividad como pudiera ser el primer viaje a Alpes, que a todos nos ha dejado grandes recuerdos, hace 40 años, era como ir de expedición al Himalaya...
Casualmente este domingo, mientras estábamos escalando con Jordi F. por Ecos, apareció de repente un veterano escalador: Josep Mª Balcells, que entre otras actividades fue uno de los aperturistas de la GAM del Cavall Bernat (Del libro: 'Història d'una Pedra'):
El de la izquierda J. Mª Balcells en 1952...
..y actualmente, creo que con 91 años...
En seguida entablamos conversación y recordaba sus escaladas de joven junto con grandes compañeros como por ejemplo Joan Nubiola, con el que había compartido grandes aventuras:
Joan Nubiola en un momento de la inauguración (31 octubre 2012) del parking que lleva su nombre en Vinyanova, EL Bruc, Montserrat (© Trini y Salva (Cucs))
Al ver como íbamos equipados, en cierta manera nos recriminó que fuéramos cargados con 'tanto material', en comparación con los 4 clavos. algún mosquetón de hierro y por supuesto cuerda de cáñamo que era su único material y enseguida nos contó como fue la apertura de la Per Davant a la Panxa del Bisbe:
Bajaba el 29-8-48 con Cirera y Pla de escalar alguna vía cuando al pasar bajo la Panxa del Bisbe vieron que había un clavo a unos 30 metros del suelo, que al parecer había abandonado Navarro en un intento de apertura de la 1º vía en esta vertiente de la aguja. Con la idea de subir para recuperar el clavo, se encaramó y al final acabaron abriendo esta arriesgada vía que marco una época.
Josep Mª Balcells accedió a hacerse una foto con nosotros...
... y en su mochila no podía faltar...
Nos describió numerosas aventuras que no olvidaremos y dijo muy a su pesar, que pensaba que este día era su último en el que deambularía por Montserrat, ya que tal como dijo encuentra que la montaña está siendo degradada de muchas maneras: como con aparcamientos de pago tanto en el Monestir como en Can Maçana, la proliferación de vías escaladas con muchos 'ferros', turistas por caminos que antiguamente solo eran recorridos por 'muntanyencs' o escaladores, etc., etc.
De regreso recorrimos juntos el camino de vuelta y nos sorprendió lo ágil que bajaba prácticamente a nuestro mismo ritmo. Nos despedimos encantados de haberle conocido y haber compartido una agradable conversación.
Tal como finaliza el editorial mencionado: 'aprofitem ara que els tenim i els hi podem demostrar tota la gratitud que es mereixen' (aprovechemos ahora que aún los tenemos y les podemos demostrar toda la gratitud que se merecen), cosa que en la sociedad actual parece olvidarse...
2 comentarios:
Moments entranyables aquests ! bona reflexió Xavi, tot i que ja comencem a ser grandets....
Segur Jaume, i demà més que avui...
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