Para última actividad de Semana Santa, condicionados nuevamente por la meteo juguetona que estamos padeciendo esta primavera, para el domingo habíamos acordado con Jordi Font de ir hacia Vilanova de Meià para escalar algo por el 'Pas Nou' donde hace ya un año que no íbamos a escalar. Aparentemente la meteo no era mala, así que fuimos director hacia el Bar Cirera para almorzar y acabar de definir los planes.
Al llegar hacía sol pero la temperatura era de unos 6º, así que almorzamos tranquilamente esperando si el sol calentaba algo el ambiente. Llegando al pueblo ya nos sorprendió ver restos que evidenciaban que por la noche había descargado bastante agua, pero viendo el sol que hacía pensamos que no sería problema.
Vimos que la 'perdiu' seguía suelta por el bar esta vez acosada por uno de los pequeños de la familia que se encarga del bar, y que por cierto ha crecido con otra criatura.
La perdiu del Cirera
Cuando ya nos decidimos para subir a investigar como estaban las paredes, ya empezamos a ver sospechosas nubes que empezaban a asomar y la temperatura seguía siendo baja. Al ser estos días festivos encontramos que junto a la Font de la Figuera había numerosas furgonetas con evidencias que habían pasado la noche allí. Al llegar al aparcamiento ya vimos que numerosos reguerones de agua se veían por todas partes y las nubes ya estaban
cubriendo todo y el viento aún agudizaba la sensación de frío. Llegamos a los pies de vía de 'Llaç lila', '5 Feixes' y hasta la Placa Syd Barret, que cada vez está más cubierta por la vegetación que ya tapan algunos de los espits de estas viejas vías. Visto lo visto decidimos desistir del plan inicial y probar suerte pasando hacia la otra vertiente cuando ya empezaban a car algunas gotas.
La sorpresa fue que al pasar hacia Llimiana estaba el cielo con un azul intenso y un mar de nieblas por debajo, así que nos encaminamos hacia Sant Llorenç de Montgai, donde al menos podríamos escalar algo.
Pasando el collado ya el tiempo mostraba mejor asapecto
Al llegar a Sant Llorenç de Montgai parecía que no fuera el mismo día que en el PasNou, ya que llegamos a estar a unos 19º y sin casi nubes. Por una serie de circunstancias, entre ellas la hora que era, optamos por escalar algo para al menos sacarnos algo el 'mono' optamos por volver al '
Triangle del Cilindre'.
Diversas cordada en sus últimos largos
Reseña original de Juan Gutiérrez del Esperó Cilindret
Esta vía que para mi repetía por tercera vez, tiene el paso más difícil en los primeros metros (V, o algo más), siendo el resto más relajado (IV+) y ya llegando a la R1 a los 30 metros, en flanqueo de III.
Jordi en el primer largo
Y asegurando desde R1
Xavi entrando a la R1
El segundo largo tiene tramos de IV con algún resalte intercalado de IV+ y llegando a la R2 a los 25 metros. Esa reunión no es la mejor para rapelar y se puede utilizar la de su derecha que es más apta para ello.
Jordi en el segundo largo
Y asegurando desde la reunión contigua de la R2 de la vía
Xavi entrando a la reunión
Buenas panorámicas con abundante agua y verde intenso
Las cordadas seguían fluyendo
Y La Formiguera vigilante al fondo
Con un largo rápel llegamos de nuevo al pie de vía
Ya había marchado la cordada que habíamos visto al iniciar y optamos por repetir la '
Vía del Racó' que también habíamos escalado juntos con Jordi.
Reseña ¿original?
Esta es la vía de más a la derecha y que cuenta con un primer largo con un resalte de IV+ en su inicio, bajando después a IV para llegar a los 25 metros, donde hay que ir con cuidado para no confundirse con la R1 de '
Aubesa'.
En el primer largo de la Via del Racó
El segundo largo empieza algo tumbado (IV) pero va ganando verticalidad a medida que yendo algo en diagonal a la derecha hacia un desplome, la dificultad aumenta (V) que cuando toda superar el mismo casi podría ser V+.
En el segundo largo
En la cima
Como en el anterior rápel nos costó algo recuperar cuerdas, y ya estando satisfechos para al menor habernos podido quitar algo el 'mono', optamos esta vez bajar caminando. Fuimos hacia Can Pere, pero al ver como estaba de atestado, al ser fechas de Semana Santa, y viendo que no era muy tarde, optamos por ir hacia Cal Anna en El Bruc y donde nos encontramos con numerosos de los habituales de la zona.
En fin que no fue un gran día de escalada, pero viendo como había iniciado, aún nos pudimos dar por contentos.