martes, 1 de marzo de 2022

Disfrutando de una de las ya clásicas de Coll Roig: Malalts de roca

 

Resenya 'Malalts de roca' actualizada

El jueves pasado había acordado añadirme al plan que tenían Jordi C. y un compañero suyo de entrenamiento en rocódromo: Joaquín R., para ir a Coll Roig, donde Joaquín no había escalado nunca y habían pensado en hacer la ya clásica: 'Malalts de roca', que había escalado con Xacó en 2016, con el equipamiento original, entre el que sorprendía en la R-2 bis este artilugio para no pisar el terreno inestable que había:




A posteriori está vía ha sido restaurada en 2019 con anclajes químicos, por parte del infatigable Santi Sanz, lo cual en parte ha transformado el carácter inicial de la vía, en la que se han sustituido los numerosos puentes de roca equipados con cordinos por estos anclajes mucho más seguros, quedando más acorde con el tipo de vías colindantes.

Quedamos en Ripoll para agruparnos y mientras tomábamos los cafés establecíamos la logística a seguir. La temperatura era algo fría, pero como en anteriores ocasiones, al llegar al Coll Roig el espléndido sol se encargaba de hacerla subir y permitir escalar sin demasiada ropa. Vimos una cordada que ya estaba en la Malalts de roca. Con una pequeña embarcada para llegar a pie de vía, ya estaban saliendo de la R-2. Al final del día descubrimos que era Nandi S. y un compañero de cordada. Se anima Jordi a comenzar con los dos primeros largos.

Pie de vía

El primer largo es mayoritariamente por placa con un resalte intermedio donde hay que apretar algo más (IV/IV+) y con un último tramo en diagonal hacia la derecha, algo herboso, llegando a los 30 metros a la R-1 en una cómoda repisa, y habiendo encontrado unos 9 químicos.

Jordi en el primer largo



Xavi y Joaquín en el primer largo
Y Jordi a la R-1

El segundo largo inicia por una fisura en ligera diagonal a la izquierda, para posteriormente afrontar una secuencia de placa hacia la derecha por las que hay que buscar el mejor camino, con algún resalte donde hay que tibar, donde no siempre es la línea recta el mejor camino, y llegando en la parte final a otra placa que es mejor evitar, después de chapar, desplazándonos algo por su izquierda, entrando finalmente a los 25 metros a la R-2 con cadena uniendo dos químicos y alguno más extra por si se cruzan cordadas de subida y bajada. En el largo unos 8 químicos y la dificultad V, aunque puede ser bastante más si se escalan las placas por en medio.



Jordi en el segundo largo
Joaquim y Xavi en el segundo largo

Aquí tal como llegamos con Joaquín a la R-2, continuamos hacia la izquierda y descendiendo algo entre el bosque para efectuar un cambio de reunión se llega a la R-2 bis, actualmente en una cómoda repisa.

Jordi en el cambio de reunión

Tomo el relevo con un bonito tercer largo con un primer tramo de unos 20 metros de escalada de canalizos que recuerdan al 'Picu Urriello' (V, o algo más), para luego salir en diagonal hacia la izquierda para llegar a una vira desde la cual superando primero un pequeño desplome con buen canto y siguiendo por placa (V) hasta llegar a los 30 metros a la R-3 de parecidas características a la R-2. En el largo unos 6 químicos.


Xavi en el tercer largo


Joaquín y Jordi en el tercer largo

Viendo que sólo quedaban dos largos y para que se llevara un buen recuerdo de la vía, cedí las cuerdas a Joaquín para que finalizase la vía. El cuarto largo inicia saliendo por la derecha de la R-3 siguiendo una fisura/diedro (V) que en un punto queda barrada por un desplome que se habrá de negociar saliendo hacia donde encontremos mejor presa con paso atlético (V+) y después ya se va suavizando hasta salir a un tramo de arista que se va tumbando hasta alcanzar la R-4 a los 25m, encontrando unos 8 químicos en su recorrido.


Joaquín en el cuarto largo

Jordi en el cuarto largo

Ahora toca un nuevo cambio de reunión caminando hacia la izquierda (no confundir con los anclajes visibles a la derecha que pertenecen a la 'Dersu Uzala') hasta llegar a una buena plataforma donde encontramos donde establecer la R-4 bis. Esta reunión sirvió como base para un par de vías deportivas que fueron desmontadas...

El quinto y último largo es la guinda del pastel, empezando algo por la izquierda y ganando altura por unas placas con pasos técnicos (V/V+) que permiten alcanzar algo hacia la izquierda la base de un diedro con buenos tramos de bavaresa con un paso final más atlético donde se concentra la máxima dificultad de la vía (6a ó Ao/V+), llegando a los 25 metros a una primera reunión, desde la cual es una buena opción para rapelar, pero mejor asegurar un par de metros más arriba en un lugar más cómodo. En el largo un total de unos 8 químicos.



Intentando explicar a un repartidor de paquetes que tenía que volver al día siguiente



Joaquín solventando sin problemas el quinto largo


Y de igual manera Jordi alcanzando la R-5

Estamos un buen rato disfrutando del paisaje y las buena panorámicas y vemos unas cordadas saliendo por Tardor calenta, que luego nos enteramos que nuevamente una de estas era la de Nandi y su compañero de escalada. 

Cordadas en Tardor calenta
El Pedraforca al fondo, donde ya aparecían las primeras anunciadas nubes

Prepara Jordi el rápel y le seguimos sin tener problemas para recuperar cuerdas y después ya iniciamos el descenso, durante el cual, al pasar por la base del tercer largo de 'Xapa la xapa' encontramos a otro conocido que ahora llevábamos tiempo sin vernos. Al llegar al Coll Roig acabamos de encontrarnos con Nandi con el que tuvimos un rato de charla.

Iniciando el rápel
A la izquierda de Xapa la xapa, encuentro de conocido...
Y sin más percances alcanzamos el Coll Roig

Después de la buen jornada fuimos a darnos un merecido homenaje al bar C-17 y pudiendo tener la habitual charla para plantear futuros posibles planes.






























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