El martes recibí una llamada de Jordi Clop comentando que con Assumpció pensaban ir el miércoles a la Paret del Pont a la 'Vía de l'Amadeu' y aunque ya la habíamos escalado con Jordi F. en marzo, no me importaba repetirla.
Como el 'sábado' pasado, al llegar la temperatura por Camarasa era de 6º, pero nuevamente al llegar a pie de vía el sol ya empezó a caldear el ambiente y nos permitió poder tener una matinal apacible con buena sensación térmica. Tal como llegamos a pie de vía, fácilmente identificable por la piedra enganchada con el nombre, al desplegar cuerdas Jordi se ofreció a comenzar a escalar. Largo riglero atlético con una primera mitad para llegar a un diedro chimenea, donde antes había un tramo en el que aleja entre chapas y que había una rama sólida que permitía facilitar la labor y que actualmente ha desaparecido V+ (por lo menos) y después va decreciendo la dificultad a medida que se sube (IV/III). En total4 químicos, 4 bolts y un puente de roca en los 30 metros. Algo desagradable la rampa de tierra que da acceso a la R1, de dos bolts con argollas.
Panorámica de la pared en la que sólo vimos otro par de cordadas
Pie de vía
En el primer largo
El segundo largo empieza con un tramo bastante potente (6a/b para los buenos y Ae-V/V+ para los más normales) que después describe un flanqueo hacia la derecha encontrando otro resalte de V+ (no obligado) para seguir algo en diagonal a la izquierda (IV+/IV) hasta alcanzar a los 25 metros la R2 de dos bolts en cómoda repisa. En el largo 10 bolts y un puente de roca.
En el segundo largo
El tercer largo empieza caminando unos metros hacia la izquierda para esquivar un tramo con roca bastante dudosa para acceder a otro tramo atlético (V) que una vez superado hay que ir en diagonal a la derecha procurando colocar cintas largas para no quedar después clavado por el roce de cuerdas y superando un tramo mantenido de V hasta ya llegar a una vira en la que caminaremos hacia la izquierda hasta alcanzar a los 25 metros la R3 de dos bolts en otra buena repisa. En el largo 12 bolts y un puente de roca.
Sigue animado Jordi y ya quedamos que acabaría ya de escalar el resto de la vía. Cuarto lago que también inicia algo por la izquierda para superar un tramo de roca a vigilar siguiendo en diagonal a la derecha (V) hasta llegar al pie de una zona más tumbada donde aún quedan restos del enorme bloque que había que el amigo Lluis Nadal el mismo día que la escalamos con Jordi F. tuvo el detalle de tirar abajo. Después se ha de superar otro resalte atlético (V) tras el cual ya se sale a un tramo de medio grimpar/caminar en diagonal a la izquierda hasta alcanzar a los 35 metros la R4 de 2 bolts en una cómoda repisa. En el largo 1 químico y 8 bolts.
El quinto y último largo es el más tranquilo con un tramo tumbado (II/III) que permite alcanzar un resalte con un marcado puente de roca en el que ya ha desaparecido el cordino que había lazado. El resalte es cuestión de evitar la peor roca que hay más a su derecha y cuando se alcanza el pronunciado desplome se esquiva hacia su izquierda (IV+/V) hasta llegar a la R5 a los 15 metros que no se sabe cual es la mejor posición, si dentase sobre ella, o quedar colgado para maniobrar mejor con las cuerdas, a pesar de su incomodidad. En total 3 bolts.
En el quinto largo
Una vez arriba ya plegamos cuerdas y después de la consabida foto de cima, emprendemos el descenso que cómodamente nos permite regresar a la carretera.
Regresando por el camino que cada vez está más marcado
Una vez llegados al aparcamiento, al estar a la sombra, ya procuramos recoger todo lo más rápido posible ya que la temperatura a la que se va el sol, desciende a velocidad. En resumen compartiendo una buena matinal en buena compañía.
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