Tossal Rodó: Vía Píxel

 

Para el viernes contactamos con Jordi Martínez y me propuso de escalar una vía abierta el año pasado en el Tossal Rodó, donde no había vuelto desde que en 2003 estuvimos escalando unas vías deportivas de su margen izquierdo con Carles Bastos, gracias a una información que había salido publicada, creo que en la revista Desnivel. La verdad es que no nos quedó demasiado buen recuerdo de esas escaladas, sobre una roca un tanto particular.

En el blog de 'Kpujo' posteriormente se detallaron las reseñas que fueron equipadas por el grupo Ca'n Tobella Climbing en relación a una casa que estuvo haciendo funciones de refugio y donde se podía obtener información directa sobre estas vías. Creo que actualmente está cerrada.

Reseñas de Kpujo

Antiguo refugio de 'Can Tobella'

Entorno a Can Tobella también se ha extendido la práctica de escalada de bloque existiendo más de 100 'problemas' resueltos.

También se ha puesto de moda entre los 'ferrateros' subir por la 'CANAL 17F' (K3/K4) al Tossal Rodó [Camino Equipado]

Recientemente gracias a los infatigables Josep Estruc y Joan Asín han ido dando algunas novedades de esta olvidada pared. Primero con el re-equipamiento de la vía Esparreguera:

Reseña 'Esparreguera' de J. Estruc

Reseña 'Esparreguera' de Joan Asín

En el blog de Joan es interesante, para ubicar la vía, el plano de acceso editado. Advertir que la pista no está en demasiadas buenas condiciones, pero con cuidado se llega al collado más a la derecha de la pared desde el que bajaremos hasta encontrar ya rastros de senderos que por momentos se pierde, encontrando alguna 'fita', hasta llegar a un par de tramos que con cuerdas fijas anudadas facilitan el acceso. Hay que procurar dejar aparcado los vehículos sin dificultar el paso de los vecinos del resto de masías existentes. 

El año pasado se equipo una nueva vía, que es la que me propuso Jordi para ir a escalar:

'Vía Píxel'

En no llega a 30 minutos conseguimos llegar a pie de vía, algo sudados, dada la temperatura que parecía casi de finales de primavera / inicios de verano. Pie de vía con un parabolt con argolla.

Desde el collado

Iniciando la aproximación en bajada

En el tramo de las cuerdas fijas

Como es una vía rapelable, dejamos cosas a pie de vía para ir más ligeros. El primer largo es el más difícil y el más equipado (12 parabolts en 30 metros). Inicia con un ligero flanqueo en diagonal a la derecha con placas de coca a controlar. Se llega a una especie de espolón a la izquierda de una visible fisura y que va superando varios resaltes con pasos muy técnicos y roca 'costrosa'. a medida que se asciende hay que aproximarse al final de la fisura siendo el paso más delicado al acabar algo desplomado sobre roca bastante quebradiza. Después se tumba y hay que seguir en diagonal a la derecha hasta encontrar en una vira bajo un desplome la R-1 de dos parabolts con argollas para rapelar. La dificultad indicada de 6a parece que subjetivamente aumenta por la calidad dudosa de la roca.

En el primer largo

Tomo el relevo con un segundo largo que inici superando un primer resalte protegido con un parabolt, tras el cual por terreno más tumbado pero de roca dudosa, se llega bajo otro resalte con un segundo alejado parabolt. Paso de decisión para superar el resalte (V) y después en diagonal a la izquierda sorteando roca suelta y vegetación hasta encontrar tras unos árboles y bajo un desplome la R-2 de dos parabolts y sólo uno de ellos con argolla, a los 20 metros.

R-2

Sigue Jordi con el tercer largo que se inicia por la derecha de la R-2 hacia un visible y algo alejado parabolt sobre un terreno algo inestable entre vegetación y roca algo suelta. Se sigue trepando por una sucesión de placas (IV) hasta llegar a un segundo parabolt desde el que hay que ir hacia una canal algo 'selvática' que nos conduce a los 20 metros a la R-3, también de 2 parabolts y con sólo una argolla en uno de ellos.

Iniciando el tercer largo

Sigo con el cuarto largo en el que aunque la dificultad pueda parecer fácil (IV con algún paso puntual de IV+), la distancia entre los anclajes, que salvo el primero que es muy visible, el resto cuestan de ver. Inicio ya sorteando vegetación y roca dudosa hasta ver que a la derecha sube como una canal mezcla de tierra, arbustos y roca descompuesta. Lo mejor es iniciar por dicha canal pero intentar salir rápido hacia la placa de su izquierda hasta chapar el alejado primer parabolt. Salir de este parabolt presenta muchas dudas ya que no sabes hacia donde dirigirte. Después de un rato de dudas, salí recto hacia una vira algo distante esperando en ella poder colocar algún flotante. A llegar veo que más a la derecha había un puente de roca lazado con un cordino y una argolla metálica. Desde ahí hay que seguir en diagonal a la derecha hasta encontrar un segundo parabolt al pie de otro resalte, que hay que superar para seguir por terreno más tumbado hasta encontrar la R-4 de dos parabolts sin argollas en una repisa.

Panorámica del inicio del cuarto largo desde R-3

En el cuarto largo

Sigue Jordi con el quinto y último largo en el que toca subir unos 20 metros entre matojos y roca suelta hasta llegar a una vira bajo un resalte final de unos 10 metros, en que hay el único parabolt instalado para superar estos últimos metros (IV) que conducen a la R-5 a los 30 metros, de 2 parabolts con una sola argolla.

En el quinto largo

En la R-5

En el final de vía el viento arrecia y nos tenemos que protegen con paravientos, así que no dudamos emprender el descenso sin más dilación. El descenso se realiza con 3 rápeles: el primero de 55m de R-5 a R-3, el segundo de 45m de R-3 a R-1 y el tercero ya hasta el pie de vía. Descender de un solo parabolt no es que motive mucho, pero siendo por terreno en su mayor parte no demasiado vertical, no supuso un gran problema. Cuesta algo el recuperar las cuerdas del primer rápel, y sin problemas en los otros dos.

En el primer rápel

En el segundo rápel

El nudo no es que habitualmente utilizo...

En el tercer rápel

A pie de vía al no sopla el viento la temperatura subió bastante. Tocó volver a descender por el sistema empleado a la subida y sin más problemas llegamos al aparcamiento.

Podríamos decir que se trata de una vía sólo apta para coleccionistas y donde hay que ir mentalizado al terreno en el que se desenvuelve. Posiblemente si esta pared no estuviera tan próxima a Montserrat,  hubiera tenido más afluencia, pero es lo que hay y no lo digo por desmerecer el trabajo realizado por sus aperturistas.